Protestas

Los sindicatos exigen fulminar los privilegios de los empresarios

“La patronal tiene todo, más de lo que quería y de lo que necesita”, afirman los líderes de UGT y CC OO

Los secretarios generales, de UGT, Pepe Álvarez (i), y de CCOO, Unai Sordo
Los secretarios generales, de UGT, Pepe Álvarez (i), y de CCOO, Unai Sordolarazon

Los sindicatos calientan motores a una semana de las protestas contra el Gobierno para que cumpla con sus compromisos y aborde ya la subida del SMI por encima de los 950 euros en que quedó estancado el pasado año. Pero tanto CC OO como UGT tienen más frentes abiertos, entre ellos fulminar lo que han dado en llamar “derecho de veto” de las patronales en el marco del diálogo social, un privilegio mantenido, a su entender, por el actual Gobierno socialcomunista, que ha derivado precisamente en la congelación del Salario Mínimo a pesar de las presiones del “ala morada” del Gobierno.

Los secretarios generales de UGT y CC OO, Pepe Álvarez y Unai Sordo, han exigido hoy una vez más al Gobierno que les convoque para comenzar a derogar la reforma laboral y han advertido de la dificultad de lograr acuerdos en este tema con la patronal ya que, a su juicio, “lo tiene todo”.

El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha puesto como ejemplo la negociación para derogar la reforma laboral, un asunto que “ahora no toca” para parte del Ejecutivo, y que los sindicatos consideran urgente. Álvarez ha denunciado que es el propio presidente del Gobierno,Pedro Sánchez, el que se equivoca al asegurar que las reformas tienen que ir de la mano del acuerdo de patronaly sindicatos, un acuerdo que hoy es “imposible”. “Si dice eso de entrada, es evidente que no hay ninguna posibilidad de llegar a acuerdo, la patronal lo tiene todo, tiene más de lo que quería, más de lo que necesita”, ha subrayado. “No se puede situar esa condición previa porque es lo mismo que paralizar el proceso de negociación”, ha advertido.

En una línea similar, el secretario general de CC OO, Unai Sordo, se ha mostrado preocupado por el “derecho a veto” que se pueda dar a la patronal. Sordo ha pedido, además, al Gobierno que tenga “cuidado” con decir “cosas que suenan bien” y lo que pueden terminar haciendo es “desincentivar el acuerdo” y meter la negociación “en un lío”.

Recortes como en 2011

Los sindicatos sospechan Sánchez está aparcando sus promesas electorales para acceder a los fondos europeos -80.000 millones a fondo perdido, uno de cada cinco euros, y más de 140.000 millones en total. Tanto UGT como CC OO tienen muy presentes los duros recortes que aprobaron los socialistas en plena crisis financiera. Entonces, un Gobierno del PSOE se convirtió en el primero en poner fin a 25 años consecutivos de revalorización de las pensiones con la congelación aprobada para 2011, que se comió un 1% de incremento, unos 1.500 millones de euros de ahorro. Además, ese mismo 2011 se puso fin también al régimen transitorio para la jubilación parcial que se sacó adelante en 2007 y se aprobó la ampliación de 15 a 25 años del periodo de cálculo de la pensión, un recorte medio del 5% para los nuevos jubilados. Entonces, como ahora, los recortes comenzaron con promesas postergadas y globos sonda.

Ese mismo Gobierno socialista fue también el único que se ha atrevido a aprobar un tijeretazo medio del 5% en las retribuciones a los empleados públicos (efectivo desde junio de ese 2011) y la congelación para 2012. El hachazo para los empleados de la administración general del Estado, de las comunidades autónomas y de los ayuntamientos, 2,6 millones de trabajadores por entonces, supuso un ahorro de unos 1.400 millones, más los 1.500 millones del recorte a las pensiones. Un año antes, el Ejecutivo socialista se gastó 13.000 millones de euros en un plan de empleo público que, según el Banco de España, apenas generó seis empleos temporales por cada millón de euros.

Los sindicatos ven paralelismos en las últimas actuaciones del Gobierno de Sánchez y las que en 2011 acabaron con el mayor recorte social de la historia democrática de España. Por eso, exigen que no se deje la pelota en el tejado de la patronal y, por eso también, han agregado la supresión de este derecho de veto concedido por el Gobierno a las patronales a sus reivindicaciones de las protestas del próximo 11 de febrero.

Sospechas sobre los planes de Escrivá

«Estamos hartos de que se escuden en la UE. Si hay condicionantes para negociar, que lo expliquen claramente», indicó Álvarez, en la presentación del calendario de movilizaciones hace unas semanas. En ese mismo acto, Sordo fue tajante al asegurar que «no vamos a renunciar a la subida del SMI, ni en enero ni en febrero ni en marzo... pese al derecho de veto que se ha otorgado a la patronal». Las centrales piden que se mantenga, al menos, la subida cosmética de apenas 9 euros, sobre los 950 en los que se encuentra el SMI, que defiende Podemos.

Además, las centrales y Podemos, que ha amenazado con una huelga general, siguen con la mosca detrás de la oreja sobre los planes del ministro Escrivá para la ampliación futura del periodo de cálculo de la pensión a 35 años. “Nos sorprenden las declaraciones sobre la necesidad de disminuir el gasto en pensiones y de articular cambios como ampliar el periodo para calcular la base reguladora, todos dirigidos al empobrecimiento» de los pensionistas, denuncian.