Diálogo social

La patronal se planta ante Díaz: “La reforma laboral es inaceptable, regresiva, intervencionista e ideológica”

Rechaza el último borrador presentado por la ministra y exige “un nuevo plantemiento”

La vicepresidenta tercera del Gobierno, Yolanda Díaz
La vicepresidenta tercera del Gobierno, Yolanda DíazCézaro De LucaEuropa Press

CEOE y Cepyme han rechazado por unanimidad la “inaceptable” propuesta para reformar la contratación del Ministerio de Trabajo, con la que se pretende que el contrato fijo sea el tipo de contrato ordinario, “porque parte de la desconfianza y la sospecha hacia la empresa”, además de porque resulta “regresiva, intervencionista e ideológica”. En un comunicado conjunto tras la última reunión de la mesa de diálogo social, ambas patronales acusan a Trabajo de “arrojar a la opinión pública dogmas confusos como la asimilación de temporalidad y precariedad”.

Creen que se está culpabilizado a los empresarios de manera torticera. “La temporalidad es un elemento intrínseco a muchas actividades de carácter estacional, con lo que reducirla a un fenómeno residual perjudica la empleabilidad de muchas personas, en especial de las que carecen de cualificación y los jóvenes, en un momento en el que su tasa de paro ronda el 40%, e incluso supera el 50% en muchos territorios”, añade la nota. Y, ante esto, ambas organizaciones han pedido a Trabajo un planteamiento nuevo para poder seguir negociando. “En estos momentos, el texto parece responder a una motivación ideológica sin fundamentos económicos, no tiene en cuenta la realidad del tejido empresarial y de las personas trabajadoras, y, por ello, aboca inevitablemente al desencuentro”, aseguran.

Ambas patronales han alertado de que estos planteamientos “van en contra de la adaptabilidad que necesitan las empresas para poder generar empleo en la actual coyuntura de incertidumbre y transformación”. También consideran que tampoco están en la línea de lo que marca la Comisión Europea, por lo que piensan que “se está poniendo en juego en último extremo la recepción ágil de los fondos europeos que el país necesita para la reconstrucción tras la pandemia”.

Las organizaciones empresariales han trasladado la necesidad de contar con un planteamiento nuevo por parte del Gobierno para poder seguir negociando. Para CEOE y Cepyme, este planteamiento debe ir alineado con las necesidades de las empresas y los trabajadores, pero también debe tener en cuenta las recomendaciones de Bruselas. Si lo que se pretende es modernizar el mercado laboral, “no parece que la mejor opción sea plantear una propuesta que en todos sus elementos es regresiva e intervencionista, restando capacidad a la negociación colectiva”. En este sentido, consideran que urge un texto “más adecuado al requerimiento de Europa y a la realidad del tejido empresarial y de las personas trabajadoras, que no entorpezca la recuperación económica”.

Para la patronal, el texto parece responder a “una motivación ideológica sin fundamentos económicos y, por ello, aboca inevitablemente al desencuentro”. Las patronales entienden que la reforma laboral propuesta es “ajena a las solicitudes europeas” y resultado de un pacto de Gobierno que no les obliga y que “es lesivo para el empleo”. “Si el Gobierno persevera en esta dirección, será sin el apoyo de las organizaciones empresariales”, defienden.

A su juicio, las propuestas del Gobierno restan capacidad de adaptación de las empresas “con soluciones intervencionistas insólitas en el siglo XXI por ajenas a la participación activa de los trabajadores y el uso excesivo del reglamento en vez de la negociación colectiva. Inevitablemente recuerda a las antiguas ordenanzas laborales, un despliegue más propio de contextos afortunadamente ya superados en toda Europa”, dice el comunicado.

Por ello, consideran que “urge un texto promovido por el Gobierno, más adecuado al requerimiento de Europa y a la realidad del tejido empresarial y de las personas trabajadoras, que no entorpezca la recuperación económica”. Por el contrario, advierte que “si el Gobierno persevera en esta dirección, será sin el apoyo de las organizaciones empresariales”, al criticar que las propuestas del Gobierno “restan capacidad de adaptación de las empresas en la entrada al mercado laboral”.

Finalmente, y con dureza, señalan que las reglas de salida, “en un ejercicio de cinismo, debilita la capacidad de adaptación del sector privado frente a las soluciones otorgadas al sector público. Solo si España recupera, o incluso supera, los niveles de actividad previos a la crisis, afrontando al mismo tiempo la modernización del modelo productivo y la recualificación de las personas trabajadoras de la mano de los fondos europeos, podemos lograr el objetivo compartido de creación sostenida de empleo, de calidad y con las mejores condiciones”, concluyen.

De esta manera, la patronal da por rotas, de momento, las negociaciones y cualquier opción a aprobar con su consentimiento la reforma laboral que pretende llevar a cabo Yolanda Díaz, que tendrá que convencerles con cesiones en el texto o tomar la calle de en medio y aprobarla con el apoyo único de los sindicatos.