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La mayoría de las empresas mejora su facturación, pero un 22% necesita ayudas directas

El porcentaje de las empresas que ha sufrido caídas en facturación se ha reducido hasta el 22,8% y la cual prevé una disminución a final del año de hasta el 21%.

El 29,1% de las empresas encuestadas por el Banco de España han notado un crecimiento en sus ventas
El 29,1% de las empresas encuestadas por el Banco de España han notado un crecimiento en sus ventasAltea TejidoEFE

Las empresas españolas esperan una mejora de su facturación en el tercer trimestre, a pesar de que esta sea de menor magnitud de lo presumido en los meses previos, y asimismo anticipan una mejora adicional a final de año, de acuerdo con la ‘Encuesta a las empresas españolas sobre la evolución de su actividad’, publicada este lunes por el Banco de España.

A pesar de que haya una mejora en la facturación esto no supondrá un aumento del nivel de empleo, el cual se mantendría estable para el último trimestre del año.

En el tercer trimestre del año, tal y como detalla el informe, la recuperación tanto de la producción como del empleo, que comenzó en el segundo trimestre, se han mantenido y además se anticipa un repunte añadido de la facturación empresarial para los meses finales de este año.

El 29,1% de las empresas encuestadas por el Banco de España han notado un crecimiento en sus ventas durante este período, muy similar al 30% logrado en el trimestre pasado. Asimismo el porcentaje de las empresas que experimentaron caídas de su facturación se redujo en el trimestre, pasando del 23,6% al 22,8%.

En relación a las previsiones a corto plazo, se prevé una mejora adicional para el último trimestre del año, etapa en la que la proporción de empresas que espera un aumento de su actividad se acercará al 35%, aumentando en algo más de 5 puntos porcentuales. Sin embargo, por el contrario, el porcentaje de sociedades que prevé una disminución de su facturación en la parte final del año continuaría disminuyendo, hasta el 21%.

En lo que respecta a las perspectivas más a largo plazo, alrededor de un tercio de las empresas encuestadas recuperarían el nivel de actividad precrisis en 2021 y en el siguiente año, lo harían en torno al 25% de los negocios; no obstante, 30% de las empresas encuestadas continuan con una incertidumbre eminente.

Hostelería y transportes mejora en verano

Durante los meses de verano, tanto la hostelería como el transporte tuvieron una actividad más intensa sobre todo impulsada por la eliminación parcial de las restricciones frente a la pandemia. En cambio, en algunas de las ramas en las que se observaron mayores avances en el segundo trimestre, como los servicios de información y comunicaciones y los servicios de no mercado, la actividad se habría desacelerado. Asimismo, en las ramas de construcción y actividades inmobiliarias, el trimestre fue negativo en cuanto a la facturación empresarial.

Sin embargo, desde el inicio de la pandemia, la evolución de la actividad de las ramas de servicios es la que se ha visto más afectada por las restricciones de movilidad de la población durante la crisis del Covid-19, por lo que todavía presenta una elevada brecha frente al nivel previo de la pandemia, a pesar de su mejora trimestral. Por el contrario, en las actividades industriales y servicios de no mercado, la brecha es menor.

Falta de mano de obra

En torno al 15% de las empresas encuestadas aseguran que se encuentran con dificultades en su actividad debido a complicaciones con los suministros realizados por los proveedores habituales y a la disponibilidad de mano de obra. Estos dos factores producen efectos negativos sobre todo en la industria manufacturera y en el comercio.

Es por ello que el 31,8% de las empresas de la rama de construcción confirman que la disponibilidad de mano de obra limita su actividad, 12 puntos porcentuales más que a finales de 2020. La escasez de este servicio ha supuesto un obstáculo para la producción de muchas empresas, situado por encima del 20% en ramas de servicios como la información y las comunicaciones (25%), el transporte (20,3%) y la hostelería (20,2%).

Mayor empleo en el tercer trimestre

Las empresas encuestadas declaran haber presenciado un aumento de las contrataciones en este tercer trimestre del año, en comparación a la estabilidad que se pudo observar en el segundo.

Adicionalmente, el incremento supera las expectativas declaradas por las empresas en la oleada anterior. El 67,1% de los negocios afirman que la ocupación se ha mantenido estable, sin embargo, 20,9% de ellas han notado un aumento en el nivel de empleo en este trimestre, 2,5 puntos por encima de lo declarado en los meses previos.

A pesar de este incremento, en este tercer trimestre, el empleo en las empresas encuestadas se situó 4,7% por debajo del que tenían a finales de 2019, mientras que la facturación ascendió al 8,6%.

Las ramas de servicios más afectadas por la pandemia en tema de ocupación, como hostelería y las actividades de ocio y entretenimiento, se mantienen aún lejos de los niveles precrisis, en casi un 17% y un 10%, respectivamente, mientras que en la información y las comunicaciones y la industria, esta brecha es muy reducida con un -0,5% y un -1,5%.

El 22% prevé solicitar ayudas directas

A consecuencia de los daños producidos por la pandemia en la economía, un 22% de las empresas españolas prevé solicitar las ayudas directas aprobadas en marzo de este año.

Las compañías que tienen esta intención son las que presentan una peor evolución de su actividad (el 49% de las que han experimentado un descenso notable de su facturación con respecto al cuarto trimestre de 2019) y en las ramas más afectadas por la crisis, como la hostelería (un 63% del total) y las actividades de ocio (el 44%).

Dependiendo del tamaño de empresa, las diferencias no son tan notables, a pesar de que son algo superiores en las más pequeñas, con un 26,8% en las que tienen entre 10 y 50 trabajadores.

Por otra parte, que haya habido una mejora en la economía de algunas de las empresas más afectadas por el Covid-19 ha generado descensos en la petición de nuevos ERTE, realización de ajustes en los salarios o en la duración de la jornada o la solicitud de nuevos préstamos ICO (especialmente acusados en sectores como la hostelería y las actividades de ocio y entretenimiento). Respecto al teletrabajo, las reducciones son más pronunciadas en ramas como la información y las comunicaciones, ya que hicieron un uso más extensivo de estas herramientas en el pasado.