Ferrovial pagó 4.828 millones en impuestos en España desde 2016

Ferrovial seguirá pagando impuestos en España pese a que confirme el traslado de su sede social a Países Bajos, con una aportación a las arcas públicas que no se limita al impuesto de Sociedades, del que en 2020 abonó nueve millones de euros por los créditos fiscales. Según las cuentas oficiales de la compañía que preside Rafael del Pino, el pago de impuestos directos alcanzó el año pasado los 282 millones, a los que se sumarían los 117 millones de imposiciones regionales y locales, los impuestos sobre el trabajo dependientes de la empresa o el IVA no deducible. También los 256 millones asumibles a terceros, como el IVA deducible, las retenciones fiscales o los impuestos al trabajo de los empleados –pero que recauda la empresa–. En total, 655 millones. Una cantidad que seguirá siendo parecida en el presente ejercicio si se mantienen similares cifras de negocio en territorio español, al vincularse directamente con la actividad empresarial, por lo que solo se reducirán si disminuye el negocio y la plantilla en España. Pero fuentes de la empresa aseguraron ayer que «se mantendrá el empleo y la actividad como hasta ahora. Ferrovial siempre ha trabajado con todos los gobiernos de cualquier color, como ya hace en el resto de países donde opera y con todos los partidos».

Por ello, la compañía pone en relevancia su contribución al país, en el que ha pagado en los últimos siete años un total de 4.828 millones en impuestos y 5.349 millones en salarios. Además, la compañía detalla que en su memoria anual prevé un crecimiento de ventas con respecto a 2022 «gracias al buen ritmo de contratación, con la adjudicación de varios contratos relevantes» vinculados a los fondos europeos, de los que Ferrovial ha pedido 5.000 millones, lo que provocará elevar las licitaciones públicas, sobre todo en los sector ferroviario, sanitario, industrial, constructor y de energías renovables. Esto implicará un evidente aumento de la plantilla y cambiar la tendencia de los últimos años –acentuada durante la pandemia–, por la que su número de empleados directos en España se redujo un 87% como consecuencia de la venta del grueso del negocio de servicios –pasando de los 40.595 empleados de 2016 a los 5.413 empleados de 2022–, con un volumen de salarios que cayó en la misma proporción, hasta quedarse en 210 millones, un 74% menos, según Europa Press. Hace siete años, esta partida ascendía a 813 millones de euros.

Desde Ferrovial se ha vuelto a trasladar que su cambio de sede no implica el abandono del mercado nacional, el tercero por importancia en su cartera de actividad. «Esta operación forma parte del desarrollo natural de la empresa; queremos competir en igualdad de condiciones frente a otros grandes constructores internacionales», manifestaron fuentes de la compañía. Ferrovial cerró el año 2022 con 1.982 millones de euros en activos en España, mientras que los últimos siete años la compañía ha pasado de contar con solo 8.638 millones de euros en activos en Estados Unidos y Canadá en 2016 a 18.509 millones el año pasado, lo que supone un alza del 114%, más del doble. Estos datos confirman la apuesta por el mercado estadounidense, en el que aspira a cotizar en un futuro, y Países Bajos le serviría como trampolín para acceder al mercado bursátil de EE UU.