El Gobierno reduce el déficit al 1,5% gracias a los ingresos por impuestos, que alcanzaron los 186.454 millones

El crecimiento de los ingresos fiscales, que se elevaron más de 3%, han propiciado la bajada del déficit de las Administraciones Públicas en septiembre al 1,54% del PIB -con 22.448 millones de euros y un descenso del 0,9% respecto al mismo periodo del año anterior-, y el del Estado al 1,37% hasta octubre -hasta alcanzar 20.053 millones-, gracias, sobre todo, al incremento de la recaudación de los impuestos temporales puestos en marcha por el Ejecutivo, pero también por el resto de figuras tributarias, que elevaron los ingresos no financieros del Estado hasta octubre en 222.917 millones de euros, un 0,4% más, de los que 186.454 millones correspondieron a impuestos, con un repunte del 3,1%.

Mientras que por el IVA se ingresaron 73.496 millones, un 1,2% menos -debido a las rebajas para productos energéticos y alimentarios- y por el IRPF, 43.401 millones, un 3,6% menos -por el efecto de la liquidación regional-, el salto exponencial de los ingresos se ha visto en el impuesto de Sociedades, con 2.846 millones más (+7,9%) -por el aumento de los beneficios- y en los nuevos impuestos extraordinarios, que aportaron 3.934 millones -impuesto energético (1.644 millones), bancario (1.264 millones), sobre las grandes fortunas (621 millones) y sobre los envases de plástico no reutilizables (405 millones)-.

Los impuestos corrientes sobre la renta y el patrimonio alcanzaron los 87.659 millones, cifra superior en un 4,2% a la de los diez primeros meses de 2022, debido a que los ingresos por el Impuesto sobre Sociedades aumentaron hasta 39.009 millones. "Este incremento se debe principalmente al aumento de recaudación de los pagos fraccionados y, por otro lado, al avance de los ingresos correspondientes de la declaración anual en un 11,8%", ha aclarado el Ministerio de Hacienda. Además, Los ingresos del Impuesto sobre la Renta de No Residentes se elevaron un 18,7%, hasta 2.911 millones.

Por tanto, la mayor parte de esta reducción del déficit no se ha debido a mayor control del gasto por parte del Gobierno, al crecer sobre todo el gasto en consumos intermedios (un 9,2%, en parte por el mayor gasto electoral), en remuneración de asalariados (un 4,3%) y en intereses de deuda (un 5,6%, hasta un total de 23.707 millones), sino a una mayor peso de los ingresos. Así, hasta octubre, el gasto no financiero del Estado se situó en 242.970 millones, sólo un 0,2% inferior a la cifra registrada en los diez primeros meses de 2022.

La partida de mayor volumen fueron las transferencias entre Administraciones Públicas, con un peso del 62,2% sobre el total de empleos no financieros, que ascienden a 151.076 millones, un 2% más que el año anterior, principalmente por la dotación adicional de 1.666 millones destinada a comunidades autónomas -en total 86.172 millones por el sistema de financiación, las entregas a cuenta y la liquidación definitiva de 2021- y corporaciones Locales -en total 21.213 millones, lo que supone 2.407 millones más que el año anterior. para compensar el saldo global negativo de la liquidación de 2020-. En el caso de la Seguridad Social, esta ha recibido 31.440 millones, 2.639 millones menos que en 2022, principalmente por las transferencias vinculadas al Pacto de Toledo.

Hacienda justifica que el déficit "está muy afectado por la liquidación definitiva del sistema de financiación correspondiente al ejercicio 2021, practicadas en julio de 2023, suponiendo un aumento de déficit para el Estado de 11.798 millones".