Internacional

El Supremo estadounidense congela más de 3.000 millones de euros destinados a la cooperación internacional

El alto tribunal ratifica la retención de 3.400 millones de euros en ayudas exteriores impulsada por Trump y advierte que la medida es provisional, no una sentencia definitiva sobre el fondo del asunto

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La decisión genera incertidumbre entre los países receptores y abre la puerta a un largo proceso judicial Europa Press

El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha confirmado la suspensión de 4.000 millones de dólares (3.400 millones de euros) que debían destinarse a programas de cooperación internacional, congelando el desembolso que un tribunal de apelaciones había ordenado realizar antes del 30 de septiembre.

La decisión, adoptada por seis votos a favor y tres en contra, avala la estrategia de Donald Trump, que en enero propuso recortar hasta 30.000 millones de dólares (25.500 millones de euros) de la partida de ayudas exteriores.

El Gobierno solicitó la suspensión urgente tras la negativa del Tribunal de Distrito y de la Corte de Apelaciones del Circuito de Washington D.C. a frenar el pago. El Supremo estima que “los daños alegados a la conducción de la política exterior del Ejecutivo parecen superar los posibles daños enfrentados por los demandantes”, por lo que ha accedido a mantener temporalmente bloqueado el envío de fondos. El auto aclara expresamente que esta resolución no prejuzga el fondo del litigio y debe entenderse como una visión preliminar mientras se resuelve el caso.

El Supremo advierte que la suspensión no anticipa el veredicto final

Los tres jueces disidentes sostuvieron que los tribunales inferiores deberían haber continuado con el análisis de la cuestión para garantizar una inspección completa de un asunto tan relevante para la política exterior y la distribución de recursos.

La retención afecta a programas de ayuda ya presupuestados y manifiesta la capacidad de la administración actual para modificar de forma unilateral compromisos financieros aprobados por el Congreso. La decisión genera incertidumbre entre los países receptores y abre la puerta a un largo proceso judicial cuyo desenlace podría condicionar la política de cooperación de Washington durante los próximos años.