Opinión

¡Aquí no hay playa!

La presentación de Borja Sémper dando saltitos descalzo en una playa artificial de Madrid no mola

MADRID, 22/06/2023.- El portavoz de Campaña y vicesecretario de Cultura y Sociedad Abierta del PP, Borja Sémper, durante la presentación de las acciones de campaña para las próximas elecciones generales, este jueves en Madrid. EFE/ Daniel Gonzalez
Borja Sémper presenta las acciones de campaña para las próximas elecciones generalesDaniel GonzalezAgencia EFE

Que nadie se lleve las manos a la cabeza porque sabemos cómo acaba la serie: Chanquete la palma, que no es lo peor de todo, y la pandillita, menos Pancho, al que dejan tirado en el pueblo, se vuelve a sus casas porque acaban las vacaciones. No nos merecíamos esto, lumbreras mías del PP, con la cantidad de cuarentones traumatizados a los que nos entra un escozor en la barriga cuando escuchamos la maldita sintonía de «Verano Azul». ¿No dieron para más las mentes de los estrategas? ¿No era posible recuperar el «tachán, tachán, tachanta, tachán» de las noches de victoria electoral en el balcón de Génova?

Que quede claro, no tiene gracia, sobre todo después de tanto tiempo, y una vez que se había superado el drama nacional de ver cercada la «Dorada» por las excavadoras para construir apartamentos. ¿Sería con aquellos compases de «No nos moverán» cantados por Piraña cuando una Ada Colau niña forjó sus cimientos de su empoderamiento político?

En cualquier caso, supimos entonces que aquello no molaba, como tampoco la presentación de Borja Sémper dando saltitos descalzo en una playa artificial de Madrid, que es como París pero al revés. Debajo de los adoquines de Mayo del 68 no empezaba la orilla del mar por mucho que se empeñasen los «bobós» de Nanterre y la Sorbona, y en la campaña del PP si quitas la arena te aparece una pista deportiva en Puerta de Hierro. No será que no se encuentran lugares mejores en cualquiera de los 7.905 kilómetros de litoral de España, pero habrán debido de pensar que somos como Suiza, Austria, Hungría o la Ciudad del Vaticano, donde los pobres no tienen ni un metro cuadrado para pinchar una sombrilla en agosto. Miren, en la fecha en la que estamos, si se llega tempranito se coge sitio incluso al lado del chiringuito. ¡Más fácil, mejor! En lugar de las olas de pega sobre cartón pluma, se van a Nerja, donde se filmó la serie y acaba de revalidar la Alcaldía el bueno de José Alberto Armijo, que por cierto es del PP. ¿O es que no lo saben?