El talante y la seguridad de los candidatos, claves para captar indecisos en el cara a cara

El cara a cara entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que se emitirá hoy en Atresmedia a partir de las 22:00 será una de las batallas más decisivas que va a haber esta campaña electoral del 23J. Tanto peso tiene que el candidato del PSOE ha liberado su agenda en los últimos cuatro días para volcarse en esta cita, que lleva esperando desde que convocó las elecciones porque su voluntad inicial era hacer seis cara a cara hasta las generales.

Los dos candidatos llegan al debate con una situación dispar: Feijóo, encabezando todas las encuestas y con la necesidad de evitar errores, mientras que Sánchez va con la urgencia de tratar de recortarle distancias al PP para no perder La Moncloa, por lo que va a tener que arriesgar mucho para vencer al candidato de los populares.

Lo cierto es que la última encuesta postelectoral del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) de las elecciones de 2019 indicó que el 95 por ciento de los españoles encuestados no cambió su voto tras ver el debate electoral, aunque es indudable que tiene impacto sobre los electores, porque siempre han mostrado mucho interés, a tenor de los datos: las audiencias han oscilado entre los 8 y los 13 millones de televidentes desde el año 1993. Por tanto, los debates electorales logran concentrar a muchos ciudadanos frente al televisor y eso acaba teniendo un efecto arrastre sobre la opinión pública.

De hecho, hay mucho en juego porque, según el último CIS, publicado la semana pasada, queda todavía un 35 por ciento de españoles con el voto por decidir y hay poco más de un 10 por ciento que se debaten entre elegir la papeleta del PP y la del PSOE. Por tanto, el cara a cara puede ser un instrumento útil para muchos españoles, para acabar de decantarse por un candidato u otro.

Pero, ¿en qué suelen fijarse los televidentes y qué es lo que más tienen que cuidar los candidatos ante este enfrentamiento? Según explica el profesor de Comunicación Política en la UPF-BSM, Toni Aira, la audiencia se suele «fijar en todo», aunque subraya más las formas que el fondo: «Se fijan más en las formas que en el fondo, sobre todo en el posado, el talante, en la seguridad que transmite el candidato, que no debe ser sinónimo de soberbia», señala Aira. «Es una cuestión de desenvoltura y credibilidad, de comodidad con lo que dicen y de contraste de opiniones», añade.

En este sentido, están por ver las formas de cada candidato, porque Feijóo sí ha mostrado un buen talante como líder del PP, sin elevar nunca el tono pese a las descalificaciones del PSOE, pero no tiene aún experiencia en este tipo de escenarios en el ámbito nacional; en cambio, Sánchez sí está muy bregado, aunque ha dado ya muestras de perder las formas, elevando el tono frente a Feijóo (con descalificaciones), y puede acabar pasándose de frenada en su deseo por recortarle diferencias al PP.

No cabe olvidar cuando Sánchez, desesperado frente a Rajoy en un debate en 2015, acusó al expresidente del Gobierno de «indecente», algo que marcó mucha ese cara a cara y la campaña. También ha tenido palabras duras contra Feijóo, al que ha definido como «insolvente» para tratar de desgastarle y descabalgarle del primer puesto en las encuestas. En todo caso, a pesar de la dura campaña orquestada por el PSOE en los últimos meses para desacreditar al candidato popular, los socialistas apenas han logrado réditos electorales en los sondeos.

Asimismo, según Aira, la clave está en que los candidatos sean capaces de «antagonizar» con el adversario adecuado en esta campaña electoral y el cara a cara puede ayudar a los dos principales candidatos. «Es obvio que los dos partidos grandes se deben centrar en el otro, y apuntando al tercero y cuarto como opciones radicalizadoras de los respectivos espacios», explica, antes de señalar, ahondando en el peso que van a tener las formas, que ninguno de los dos debe caer en la «performance»: «Lo que deben de proyectar en el debate a dos es un perfil de presidencialidad, de solvencia y, por tanto, evitar ahora performances como la de Albert Rivera».

No obstante, también advierte de que, si Sumar o Vox caen en esas «performances», también pueden perjudicar al bloque de la izquierda o la derecha, porque pueden acentuar el «miedo» en aquellos sectores que rechazan la «inestabilidad».

Así será el debate

►Cuatro bloques temáticos se han preparado para hoy, en este orden: Economía, Igualdad, pactos postelectorales y políticas de Estado e internacionales.

►El cara a cara tendrá una duración de alrededor de 100 minutos y los candidatos estarán sentados uno frente al otro, en una mesa de 2,5 metros.

►Feijóo será el encargado de cerrar el «minuto de oro» y el candidato del PSOE será el último en llegar a las instalaciones de Atresmedia, según el sorteo.

►Los moderadores, Ana Pastor y Vicente Vallés, controlarán que el debate no se convierta en un «monólogo» entre los candidatos.