Las autonomías se rebelan contra Hacienda por el reparto del fondo

Las comunidades autónomas se rebelan contra el Gobierno a causa del fondo no reembolsable de 16.000 millones de euros destinado a paliar los efectos del coronavirus en España. Existe un descontento generalizado debido, a los sucesivos cambios de criterios en el reparto y al hecho de que Hacienda no haya aclarado todavía el montante total que recibirá cada comunidad autónoma en cada uno de los tramos.

Hasta ahora está confirmado que el Gobierno desembolsará los 16.000 millones de manera progresiva, en julio (6.000 millones para el gasto sanitario), septiembre (2.000 destinados al gasto educativo), noviembre (3.000 millones para gasto sanitario) y diciembre (5.000 para compensar la caída de ingresos), sin embargo, todavía se desconoce cómo afectará a cada comunidad ese reparto, es decir, que cantidad recibirá cada una. Desde Hacienda se escudan en que todavía no pueden contabilizar el reparto del mes de noviembre, al no poder anticiparse a la situación que dejará el coronavirus entonces en cada comunidad.

Desde comunidades gobernadas por el Partido Popular, como Andalucía hasta las lideradas por barones socialistas, como Castilla-La Mancha, pasando por Cantabria o País Vasco han alzado la voz esta semana contra el reparto del fondo. Desde Andalucía califican el reparto como un «castigo evidente y real». Según sus cuentas recibirán entorno a 2.1000 millones de financiación, casi 1.000 menos de lo que ellos consideran justo. Según su argumento no es lógico que «una comunidad con un tercio del territorio y un millón menos de habitantes que Andalucía como Cataluña tenga un tercio más de financiación».

Desde el País Vasco, el lendakari Íñigo Urkullu enarboló ayer su malestar con el presidente del Gobierno. «Un enfado, entre el 0 y el 10» a causa de la exclusión de su comunidad del tramo de 5.000 millones. Urlullu pide que se compense esta falta de financiación con capacidad de endeudamiento e incremento del objetivo del déficit y recuerda que la semana pasada el Ejecutivo se comprometió a ello. Reclama que se convoque con urgencia la Comisión Mixta del Concierto para acordar bilateralmente el reparto ante la «flamante vulneración de la Ley de Metodología de determinación del Cupo». El presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla califica el fondo como «absolutamente injusto» y avisa que continuará luchando por su mejora. De hecho, ya ha pedido el aumento del reparto, en hasta 50 millones más, respecto a los 121 millones que el gobierno cántabro ha calculado que le corresponderán. Una de las comunidades más golpeadas por el coronavirus, junto a Madrid, Castilla-La Mancha cree que recibirá sobre 630 millones de euros, lo cual, a juicio de la Junta no es adecuado y debería corresponder a la incidencia del coronavirus por cada comunidad. Desde Galicia también muestran su oposición al fondo. En la Xunta, consideran que la propuesta es totalmente insuficiente para Galicia. Aunque aún se encuentran a la espera de conocer el montante total, valoran que los criterios para el reparto son perjudicial para su comunidad. Creen que saldrán peor parados que en el reparto de marzo, cuando el índice poblacional pesaba un 80%.

Castilla y León reclama también que el Gobierno recalcule el fondo extraordinario, pues, en palabras del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, el nuevo criterio de reparto «da la espalda» a los territorios que afrontan el reto demográfico. En principio, la comunidad recibirá más de 110 millones, sin embargo, el jefe del Ejecutivo autonómico espera contar con hasta 650. El president de Cataluña, Quim Torra no está tampoco conforme con el dinero que recibirá del Gobierno, a pesar de ser una de las comunidades más beneficiadas, junto a la Comunidad de Madrid. El Ejecutivo les trasladará hasta 3.200 millones de euros. Sin embargo, desde la Generalitat reclaman 15.000 millones para afrontar la crisis. Por su parte, Madrid deduce que recibirá unos 3.200 millones de euros. Desde el gobierno regional lo consideran como una buena noticia.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, se defendió ayer en el pleno del Senado asegurando que es «imposible» contentar a todas las comunidades autónomas por sus situaciones dispares en cuanto a los efectos del coronavirus y aseguró que el fondo suponía un «balón de oxígeno real» para atender las necesidades de cada autonomía.