Fiscalía General del Estado

Fiscales denuncian la “opacidad” de Delgado, quien se “sitúa en las antípodas de la autoproclamada transparencia” con la que accedió a fiscal general

La Asociación de Fiscales exige que se convoque a la cúpula de la Carrera para que pueda pronunciarse sobre las querellas y denuncias contra el Gobierno por el Covid. Dejar el criterio en manos de la Secretaría General Técnica derivaría en que se cuestionase la "independencia" de la Fiscalía

La asociación que preside Cristina Dexeus se ha vuelto a mostrar muy crítica con el criterio de que la Fiscalía General no quiera convocar a la cúpula de la Carrera para etudiar los críterios jurídicos a seguir en las acciones penales contra el Gobierno por el Covid-19
La asociación que preside Cristina Dexeus se ha vuelto a mostrar muy crítica con el criterio de que la Fiscalía General no quiera convocar a la cúpula de la Carrera para etudiar los críterios jurídicos a seguir en las acciones penales contra el Gobierno por el Covid-19C PASTRANO

La fiscal general del Estado “ha hecho hábito de la actitud de no contestar a las cuestiones que por la asociación mayoritaria de Fiscales se le han dirigido” contribuyendo de ese modo “a incrementar la sombra de duda respecto a la imparcialidad que su nombramiento extendió sobre toda la Carrera y se sitúa en las antípodas de la autoproclamada transparencia con la que accedía a la más alta dirección del Ministerio Fiscal”. Así comienza la carta que ha dirigido hoy la Asociación de Fiscales (AF) al teniente fiscal del Tribunal Supremo, Luis Navajas, ante el silencio por respuesta de Delgado para que les informase sobre las 51 acciones penales registradas en el Supremo contra el Gobierno o algunos de sus integrantes por la gestión de la crisis derivada del Covid y la necesidad de consultar a la Junta de Fiscales de Sala, la cúpula de la Carrera, para que ésta puede emitir y unificar los criterios jurídicos a seguir por el Ministerio Público.

En ninguno de estas acciones puede intervenir Dolores Delgado, ya que fue ministra de Justicia hasta poco antes de su nombramiento como fiscal general. Por ello, sostiene la asociación mayoritaria de fiscales, “apenas han trascurrido cinco meses desde el día de su toma de posesión y el número de asuntos que exigen” su abstención, así como la importancia cuantitativa y cualitativa de los mismos y la consecuente repercusión mediática también, “marcan un hito que se nos antoja de difícil superación”. Por ello, en todas esas acciones penales, Delgado “ha sido sustituida, o ha debido serlo, como tal, por el Teniente Fiscal del Tribunal Supremo”.

Es por ello por lo que se dirigen a Navajas a través de una misiva, a la que ha tenido acceso LA RAZÓN, para que les informe de la situación de esas querellas y denuncias y la necesidad de convocar a la Junta de Fiscales de Sala, algo que, en opinión de la Asociación de Fiscales, no es algo por lo que tenga mucho interés: “Observamos con notable preocupación la deriva de la Fiscalía General del Estado a prescindir de la Junta de Fiscales de Sala, a la que se obvia omitiendo su convocatoria y sustrayendo de su deliberación y consulta aquellos extremos que estatutariamente le corresponden, en favor de la Secretaría Técnica”, para cuya jefatura Dolores Delgado nombró a Álvaro García, ex presidente de la Unión Progresista de Fiscales, a la que también pertenecía la hoy cabeza del Ministerio Público.

De hecho, es a través de esa relación de confianza que llevó Álvaro García a la Jefatura de la Secretaría Técnica desde donde “se puede cuestionar la apariencia de imparcialidad si se residencia en esta unidad el dictamen técnico-jurídico en procedimientos en los que están implicados miembros del Gobierno”. De este forma y por esas condiciones, añade la AF “la Secretaría Técnica se perfila como un órgano que puede ser permeable al parecer que la fiscal general del Estado abstenida tenga sobre las cuestiones pendientes ahora del informe del Ministerio Fiscal”.

Por último, la citada asociación advierte que no van a “sucumbir” al desaliento ante la “aparente costumbre” de Dolores Delgado “de desatender las peticiones de información que se le dirigen”.