6-D

Los socios de Sánchez volverán a boicotear el Día de la Constitución

ERC y Bildu aseguran que no tienen «nada que celebrar» en el 42 aniversario de nuestra Carta Magna

El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián; la portavoz de EH-Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua; y el diputado de EH Bildu, Oskar Matute; conversan durante el acto en el que han realizado un minuto de silencio convocado en el Congreso de los Diputados con motivo del 25-N, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián; la portavoz de EH-Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua; y el diputado de EH Bildu, Oskar Matute; conversan durante el acto en el que han realizado un minuto de silencio convocado en el Congreso de los Diputados con motivo del 25-N, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.Eduardo ParraEuropa Press

¿Puede un sistema constitucional perdurar en el tiempo cuando sus enemigos declarados no solo campan a sus anchas en su interior y se valen del propio sistema para dinamitarlo sino que son instrumentales para sacar adelante algo tan básico como los presupuestos generales del Estado? La historia de nuestro país ya respondió a esta pregunta en los años treinta del siglo pasado y, a buen seguro, volverá a contestarla en el futuro próximo, pero mientras tanto los españoles contemplamos paradojas como la que tendrá lugar el próximo domingo: apenas unos días después de votarse en el Congreso de los Diputados -con el apoyo de independentistas y extrema izquierda- la Ley de Presupuestos, los mismos partidos a los que Sánchez ha tenido que realizar preocupantes concesiones boicotearán la celebración con motivo del 42 aniversario de nuestra Carta Magna. Tal es el caso de Esquerra Republicana (ERC), el PNV y EH-Bildu, socios presupuestarios del Gobierno del PSOE y Unidas Podemos. Tampoco harán acto de presencia Junts, las CUP y el Bloque Nacionalista Gallego (BNG). Los diputados de estas formaciones forman un 10% del total de Congreso, es decir, 35 de los 350 escaños totales.

Con la duda de qué harán Más País y Compromís, por el momento parece que los partidos que sí que harán acto de presencia en las celebraciones del aniversario de la Constitución en el Congreso de los Diputados serán el PSOE, el Partido Popular, Vox, Unidas Podemos, Ciudadanos y las siguientes formaciones que conviven en el Grupo Mixto con las CUP: Coalición Canaria, Unión del Pueblo Navarro, el Partido Regionalista Cántabro, Nueva Canarias, Foro Asturias y Teruel Existe. En realidad la ausencia de ERC, EH Bildu PNV y la antigua Convergencia poco puede sorprender ya que siempre han boicoteado este tipo de actos salvo cuando han tenido representación en la Mesa del Congreso, cuando sí que solían enviar una representación. A estos partidos se sumaron tras las primeras elecciones generales que se celebraron en 2019 las CUP y el BNG que entraron por primera vez en el Congreso (es el caso de la formación catalana) o regresaron a él (como sucedió con el partido gallego) en aquella ocasión.

Sin embargo este año las ausencias serán especialmente notorias –nos referimos a las de Bildu, PNV y ERC– ya que tendrán lugar pocos días después de que se aprueben en el Congreso los Presupuestos Generales del Estado y se constate la paradoja que mencionábamos más arriba. Al menos su «plante» a las celebraciones que tendrán lugar en el Congreso de los Diputados no se extenderán en un enésimo «plante» a Felipe VI ya que el Jefe de Estado no ha asistido nunca a este tipo de conmemoraciones salvo el caso especial del 40 aniversario que se celebró hace dos años.

Las celebraciones serán distintas este año como está siendo distinto todo. La segunda ola del coronavirus ha obligado a la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, a trasladarla al exterior de la Cámara Baja, previsiblemente a la conocida como Puerta de los Leones que da a la Carrera de San Jerónimo. Habitualmente esta efeméride tenía lugar en el Salón de Pasos Perdidos del Palacio del Congreso, donde cada año suelen darse cita en torno a 700 invitados entre miembros del Gobierno, las más altas autoridades del Estado, así como diputados y senadores en lo que era considerado por todos una de las más importantes citas del calendario político en España. Sin embargo, las restricciones del aforo que ha traído consigo la pandemia han obligado a la Cámara a pensar un ‘plan b’ y buscar un espacio que garantice la asistencia de parte de esa representación habitual y la correspondiente distancia de seguridad interpersonal. Por ello, Batet ha decidido sacar a la calle el acto, en concreto a la Carrera de San Jerónimo, desde donde se prevé que pronuncie su tradicional discurso con motivo del aniversario de la Constitución ante las entre 200 y 250 personalidades que el Congreso prevé invitar este año. Será la segunda ocasión que lo haga después de estrenarse el año pasado junto a la presidenta del Senado Pilar Llop. Año tras año, tras ese discurso de la Presidencia, tenían lugar los habituales corrillos, conversaciones informales entre periodistas y políticos, pero este año el Congreso también ha decidido suprimir esta práctica con el fin de evitar las aglomeraciones y, con ellos, los riesgos de contagio del Covid.

La evolución de la pandemia también ha provocado que el Congreso haya tenido que descartar este año las Jornadas de Puertas Abiertas que se celebran cada año en torno al 6 de diciembre. Estas jornadas, puestas en marcha cuando Federico Trillo ocupó la Presidencia de la Cámara, se vienen realizando desde 1997, por lo que, de celebrarse, la de este año habría sido la edición vigésimo cuarta, informa Ep. Se trata de la segunda ocasión en 23 años que el Congreso se ve obligado a suspender este tradicional evento. La primera vez fue en 2012, cuando el entonces presidente, el popular Jesús Posada, decidió no celebrarlas como consecuencia de las obras que se realizaban en el Palacio de la Carrera de San Jerónimo.