14-F

Borrás esquivará al Supremo tras las elecciones catalanas y la investigará el TSJC

El Alto Tribunal remitirá la causa nada más tener certificación oficial de que ha sido elegida diputada

Laura Borras, junto al entonces vicepresdiente de la Generalitat, Pere Aragonès y al ya ex presidente Quim Torra, el día de la vista del recurso contra la condena por desobediencia de este último
Laura Borras, junto al entonces vicepresdiente de la Generalitat, Pere Aragonès y al ya ex presidente Quim Torra, el día de la vista del recurso contra la condena por desobediencia de este últimoEduardo ParraEuropa Press

Laura Borrás, todavía portavoz de Junts per Catalunya (JxCat) en el Congreso de los Diputados, Laura Borràs y candidata a la p residencia de la Generalitat de Cataluña en las elecciones autonómicas del 14 de febrero , no tendrá que volver a pisar el Tribunal Supremo ni verse las caras ni con ningún representante de la Fiscalía ni con el magistrado Eduardo de Porres, quien le investiga por posibles irregularidades en la adjudicación de contratos cuando era directora de la Institución de las Letras Catalanas. En concreto, el magistrado encontró indicios de los delitos de prevaricación, fraude a la Administración, malversación de caudales públicos y falsedad documental , en relación con la adjudicación de 18 «contratos un total de 18 menores» por 259.863 euros, de forma «directa o indirectamente de manera arbitraria»” a su amigo y también investigado en esta causa Isaías Herrero, un programador informático.

Y ello, porque en el mismo momento en que se tenga constancia de que ha sido elegida diputada para la cámara catalana, el Tribunal Supremo dictará la correspondiente resolución en la que se hará constar que ha perdido la competencia y que ésta corresponde desde ese momento al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.

Para que el Alto Tribunal mantuviese su competencia sería necesario que el instructor hubiese dictado el correspondiente auto de apertura de juicio oral contra Laura Borrás, y ello, además, exige que se hayan formalizado los escritos de acusación y defensa. Un trámite que, como señalaron a LA RAZON fuentes del Supremo «está lejos todavía».

De hecho, ahora mismo la causa se encuentra en período de instrucción y Laura Borrás, el día que fue citada tras la concesión del correspondiente suplicatorio, se acogió a su derecho a no declarar. El instructor está pendiente de realizar nuevas diligencias, por lo que es materialmente imposible que se puedan realizar todos los trámites antes de las elecciones catalanas del próximo día 14.

Nuevo instructor

Por tanto, una vez el Supremo reciba la certificación del Parlament de que Borrás ha resultado electa remitirá la causa a la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, quien designará al nuevo instructor de ese procedimiento, en función del turno de reparto previamente establecido al respecto.

La dirigente nacionalista catalana, asistida por el abogado Gonzalo Boye –el mismo que defiende a Carles Puigdemont– aseguró a su salida del Tribunal Supremo, el mismo día que se acogió a su derecho a no declarar –el pasado 23 de julio–, que los contratos puestos en duda fueron en todo momento «correctos en tiempo, forma, calidad y servicio público», y que con la prueba pericial solicitada espera «poder demostrar» que esos trabajos se realizaron, el autor, el precio objetivo «o incluso la unidad funcional de los mismos».

Laura Borrás señaló que no declararía hasta que se practicase una prueba pericial con la que, según ella, demostraría que todos los contratos se adjudicaron de acuerdo a la legalidad.

También arremetió contra la juez de Barcelona que realizó las primeras investigaciones sobre estos hechos –y que remitiría al TS– que calificó de prospectiva y que, en su opinión, se habrían hecho «a una aforada de un modo secreto», en el transcurso de la cual «se cometieron ilegalidades».