Análisis

Así es la regulación contra el virus en Alemania, Francia, Reino Unido e Italia

Tras la sentencia del Tribunal Constitucional decretando ilegal el primer estado de alarma de 2020, los juristas y los políticos españoles siguen dividiéndose sobre como actuar en caso de que nuestro país precisase de una nueva limitación de la libertad de circulación o de otros derechos fundamentales de los ciudadanos para contener la incidencia del coronavirus. ¿Cómo se regula en nuestros países vecinos?

Alemania

Posee una regulación compleja para imponer un estado de alarma. En 1968 se promulgaron las leyes de emergencia (Notstandsgesetze) aunque hasta ahora no se han aplicado y, con la pandemia, se optó por poner en marcha una ley ordinaria del año 2000, modificada el 27 de marzo de 2020, llamada Ley de protección frente a infecciones así como por reforzar la coordinación de medidas de salud y seguridad públicas entre el Gobierno federal y los dieciséis estados federados. De hecho, fueron los gobiernos de los Länder quienes gestionaron la epidemia en cada territorio, según el informe comparativo de las medidas excepcionales elaborado por la Unión Europea. Algunos Länder declararon estado de catástrofe a nivel regional, como hizo por ejemplo el ministro del Interior bávaro, Joachim Herrmann.

Francia

Francia mantiene hasta finales de septiembre los dispositivos del estado de emergencia que permiten, si fuese necesario, volver de forma inmediata a medidas como el toque de queda o la restricción de movimientos. Las prolongaciones han ido durando cuatro meses y la última data del pasado mes de junio y se han ido sucediendo desde el 17 de octubre de 2020 para frenar la segunda ola del virus. Si bien Francia podría haber aplicado el «estado de emergencia», el Gobierno ha optado por promulgar una «ley sobre medidas urgentes», sobre la que el Ejecutivo de Emmanuel Macron ha ido aplicando medidas sanitarias y económicas en el país galo. La norma implica control parlamentario tanto de la Asamblea Nacional como del Senado, que pueden pedir información en cualquier momento. Además, las cámaras han de refrendar las medidas.

Reino Unido

El Reino Unido no tiene Constitución escrita como tal. Por lo tanto, con la pandemia, en marzo de 2020, Westminster tramitó en tiempo récord la llamada «Ley Coronavirus» que otorgaba al Gobierno poderes especiales para lidiar con la crisis. Eso sí, los poderes debían ser renovados cada seis meses. Y cuando Boris Johnson ha pedido extenderlos para hacer frente a las nuevas olas, no ha estado exento de polémica, ya que sus propias filas querían que el Parlamento tuviera más voz y voto en la toma de decisiones. En septiembre de 2020, la primera extensión no fue nada fácil. Los conservadores se mostraban menos indulgentes con el Gobierno, más escépticos con los consejos de los científicos y estaban más preocupados por la economía de un país ya en recesión. Para evitar una rebelión interna, el primer ministro acabó cediendo a las demandas de los rebeldes prometiendo que «para medidas nacionales significativas, con efecto en toda Inglaterra o en todo el Reino Unido» se consultaría al Parlamento y «siempre que sea posible» se realizarían votaciones antes de que tales reglamentos entren en vigor.

Italia

El instrumento jurídico en Italia equivalente al estado de alarma español es el estado de emergencia, actualmente en vigor hasta el 31 de julio. Viene declarado a través de un decreto del Consejo de Ministros ante emergencias sanitarias o calamidades naturales como terremotos o inundaciones. En principio, no puede superar los seis meses, aunque puede ser prorrogado hasta dos años siempre que lo aprueben las dos cámaras.