Arquitecto de profesión, Tomás Guitarte aterrizó en la Política hace dos años con el objetivo de llevar a la España vaciada al hemiciclo. Lo ha conseguido. En las últimas semanas no se habla de otra cosa. Coincidiendo con la votación de los presupuestos, el diputado de Teruel Existe atiende a LA RAZÓN en las inmediaciones del Congreso de los Diputados.
-Quería poner a Teruel en el mapa y últimamente solo se habla de la España vaciada, ¿le sorprende?
Realmente era uno de nuestros principales objetivos: visualizar el problema que tenemos en muchos territorios de España que, a similitud de Teruel, han sufrido un abandono institucional durante décadas. Creo que hay un alto consenso social y político de que éste es un problema grave de país y que hay que tomar decisiones.
-Paralelamente, se pone en cuestión el sistema electoral, ¿qué opinión le merece?
Lo primero es sorpresa. Llevamos 45 años funcionando así. Hasta ahora no se cuestionaba porque los representantes que tenían era más de obediencia partidista que territorial.
-Un político llamó esta semana a los movimientos de la España vaciada «populismo territorial», ¿qué opina al respecto?
Lo de populismo como algo peyorativo es algo que está fuera de toda discusión. Nosotros somos movimientos sociales muy arraigados en los territorios. No se hace solo para que se atiendan los problemas locales de un territorio, sino que se hace para impulsar un modelo de desarrollo distinto al actual. Por eso cuando se nos habla de localismos, decimos que somos todo lo contrario y que no han entendido nada.
-La España vaciada dará el paso para concurrir a las próximas elecciones, ¿cuál es el encaje de Teruel Existe?
No somos dos movimientos distintos. La España Vaciada es Teruel Existe y Teruel Existe es la España vaciada. Aspiramos a estar con más presencia en el hemiciclo, a ser posible con un grupo parlamentario propio, que pueda, de verdad, incidir las políticas.
-¿Creen que hay alguna provincia que pueda conseguir un escaño?
Hay muchas. Soria, Jaén, Cuenca... casi todas las de Castilla-León y casi todas las de Aragón.
-Han recibido críticas por ir de la mano con ERC y Bildu en la aprobación de los PGE... ¿qué tiene que decir?
Es un argumento muy débil porque todo el mundo sabe que es una mera coincidencia en la votación. Por distintas argumentaciones muchos llegamos a la decisión de votar «sí». Pero eso nos ha pasado a nosotros y al PP.
-Han conseguido que se incluya una rebaja de los costes laborales del 20 por ciento en Soria Teruel y Cuenca, ¿eso es dumping fiscal?
No, no lo es. Esto se plantea porque la Unión Europea lo ha autorizado. Significa que esos tres territorios tienen menos de 12,5 habitantes por kilómetro cuadrado. Ese reconocimiento permite ayudas para la implantación y funcionamiento de las empresas. Creemos que es la herramienta más eficaz para luchar contra la despoblación.
-¿Qué le pareció la reunión esta semana en Santiago de ocho presidentes para hablar del sistema de financiación?
Nos parece positivo. Lo que defienden nos parece razonable. Los servicios hay que valorarlos en su coste real y el Estado tiene que garantizarlos.
-¿Ha sido duro llevar la España vaciada al hemiciclo?
Estos dos años han estado marcados por la pandemia, que puso en evidencia que las áreas menos densas tienen ventajas sanitarias y ha ayudado a poner el foco en el teletrabajo. Estamos en el momento más adecuado para intentar resolver el problema de la despoblación: por la revolución tecnológica y por los fondos europeos.
-¿Qué le ha sorprendido del hemiciclo?
Lo que más me sorprendió como ciudadano es la disputa y el conflicto polarizado.
-¿Se presentará de nuevo a las elecciones?
Pues no depende de mí.