El PSOE descarta por ahora la aplicación del artículo 155 en Castilla y León: “No estamos ahí”

Paso a paso. El Gobierno descarta, por ahora, recurrir a la suspensión de la autonomía en Castilla y León -vía aplicación del artículo 155 de la Constitución- tras la polémica generada por los protocolos antiabortistas en la región. “No estamos ahí”, ha señalado la portavoz del PSOE, Pilar Alegría, en rueda de prensa, asegurando que no sabe “de dónde ha salido” la noticia, en relación a la publicación de estas intenciones en el diario “La Vanguardia”.

Fuentes socialistas señalan que antes de recurrir a esta medida hay una serie de pasos que se deben agotar primero. El jueves, tras el anuncio por parte del vicepresidente de la Junta, García Gallardo, de que el protocolo entraría en vigor este lunes, Sanidad pidió información a Castilla y León. Como no obtuvo respuesta, el domingo por la tarde, el Ejecutivo central activó el requerimiento por escrito en el que se pedía que se abstuvieran de implementar cualquier medida antiabortista y se remitieran de inmediato los protocolos que pensaban aplicar.

Si este trámite, en el que actualmente nos encontramos y que tendría un plazo de hasta dos meses para recibir respuesta, no sirviera para unificar posiciones, se procedería a crear una comisión técnica entre los dos gobiernos para estudiar la situación y, si en este foro no se llegara tampoco a ningún acuerdo, se procedería a la vía contencioso administrativa. En este procedimiento se podría pedir al juez medidas cautelares para paralizar los citados protocolos, pero sería una decisión judicial y en ningún caso tendría un carácter automático.

De momento, la situación está todavía en una fase muy embrionaria y la estrategia más inmediata pasa por focalizar la atención en Alberto Núñez Feijóo, utilizando la controversia para minar la imagen de moderación que se afana en construir y dibujarle como un líder falto de autoridad e iniciativa. En este sentido, desde el PSOE se recuerda que “el PP necesita a Vox para llegar al Gobierno”, porque le tiene como “aliado natural”.

En Ferraz se afanan en urgir al líder de la oposición a pronunciarse porque consideran que con su silencio no es “el líder del PP, sino el rehén de Vox”. “Hace lo que mejor sabe hacer: guardar silencio y escurrir el bulto. Esta vez no vale. Si sigue callado demuestra su ausencia de autoridad dentro del PP”.

Resucitar el miedo a Vox

En plena precampaña, el PSOE no va a dejar pasar la polémica sobre el aborto en Castilla y León y la instrumentaliza ya para resucitar la estrategia del miedo a Vox. Una estrategia que ya se demostró agotada en las últimas convocatorias electorales, por ejemplo, en Andalucía, donde la falta de alternativa de los socialistas acabó generando una corriente de voto útil hacia Juanma Moreno para que pudiera gobernar en solitario. En Ferraz sostienen ahora que la situación ha cambiado, el contexto es diferente y existen una serie de “variables” que hacen que se vuelva a recurrir a esta estrategia.

“Donde el PP gobierne con el apoyo de la ultraderecha, que es su política de pactos, las mujeres volverán a tener en peligro sus derechos y libertades”, señaló el viernes la vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, que compareció en rueda de prensa después de la reunión en Ferraz. En la misma línea, el sábado en una acto en Andalucía, el presidente del Gobierno calificó un futuro pacto entre el PP y Vox a nivel nacional como la “coalición del miedo”. “La derecha sabe qué camino ha tomado, que es el que le marca la ultraderecha”, advirtió Sánchez, en contraposición con “los gobiernos socialistas, con los que va haber avances en beneficio de las mujeres y ni un solo retroceso”.