Encuesta NC REPORT

El 60% de los votantes de Vox cree que el partido va a desaparecer

La crisis generada por Vox pasará factura al partido, según el 83,4% de los ciudadanos y hasta la mitad de los suyos lo reconoce

Encuesta NC Report
Encuesta NC ReportA. CruzLa Razón

El terremoto provocado por Vox a nivel nacional por la ruptura con el Partido Popular en cinco gobiernos autonómicos no está siendo bien encajado ni por sus propios dirigentes –que recelan de la decisión y que incluso se han rebelado en Castilla y León y en Extremadura contra las órdenes de Santiago Abascal– ni tampoco por los ciudadanos. En las filas del partido tampoco hay un cierre de filas que demuestre el aval a la postura del núcleo duro.

La decisión tomada por el partido todavía debe ser analizada profundamente, por sus consecuencias electorales, en la sede de Vox y en breve empezarán a llegar al partido encuestas que midan lo acertado o no del movimiento de cara a las urnas. De momento, la encuesta realizada por NC Report para LA RAZÓN ofrece ya una primera fotografía y en la sede del partido deberían encenderse las alarmas porque hay un 58% de los ciudadanos que cree que la formación desaparecerá como Ciudadanos. Y es más, un 60% de quienes así lo opinan son votantes del propio Santiago Abascal. Y es que el patrón seguido por Vox es el que en su día exploró la formación naranja para firmar tres años después su extinción total. El partido liberal rompió en Murcia con el PP y ello provocó una réplica a nivel nacional que no pudo controlar y que supuso de facto su salida de gobiernos autonómicos y de parlamentos regionales cada vez que se convocaban elecciones. No obstante, un 34,4 por ciento no cree que el partido muera en estos momentos.

Si bien Vox ha limitado el conato de rebelión a la salida –por el momento–de dos consejeros autonómicos, lo cierto es que el partido es en estos momentos un polvorín entre quienes entienden la postura del partido pero no comparten la decisión de dinamitar todos los puentes con los populares y los que sí defienden a Abascal. A ello se le suma el malestar evidente en los cargos autonómicos que han sido cesados y en los que llegarán en los próximos días, directores generales o asesores y que ahora tendrán difícil su recolocación en la vida privada. Una fractura total en el partido, según lo define el 83,4% de los encuestados por la empresa demoscópica. Quienes así lo opinan, sobre todo, provienen del PP, PSOE y Sumar, pero hay un 53,3% de votantes de Santiago Abascal que también hace ya esa reflexión, y esto debería preocupar al partido, de cara a unas futuras urnas.

El hecho de que Vox haya roto, eso sí, es aceptado positivamente entre los electores. Un 63,6 por ciento así lo avala, mientras que un 28,8% reconoce que le parece mal. Son los partidos de izquierda quienes así lo suscriben con mayor determinación. Pero también hay tranquilidad después de la ruptura en el PP, según un 67% de sus votantes. El propio Alberto Núñez Feijóo garantizó normalidad y estabilidad tras la crisis con Vox. Entre los votantes de Abascal, hay sensaciones encontradas todavía.

Todas las miradas están puestas en el líder de Vox, por ser el responsable directo de romper con el PP. En el Comité Ejecutivo Nacional hubo dirigentes que discrepaban de su decisión, e incluso algunos que se rebelaron. Muchos advirtieron al presidente de que se estaba dando un paso erróneo, aunque no hubo marcha atrás. Así lo ven también el 72,8% de los ciudadanos que considera equivocada la postura de Abascal. Tan solo un 18,6% respalda su postura. Lo respaldan el 94% de votantes del PP, el 73,8 y 100% votantes del PSOE y Sumar respectivamente. Hay un 41,7% de afines a Abascal que también lo manifiesta, muy igualado con quienes sí le respaldan, esto es un 50%.

Una de las lecturas que se ha hecho en estos días tras la crisis es que el PP puede salir beneficiado tras la separación en los gobiernos autonómicos. De hecho, la sensación en Génova en estos días era la «haberse quitado un peso de encima», según fuentes de la dirección. Sobre todo porque el Ejecutivo de Pedro Sánchez ya no podrá utilizar la estrategia de desgastar a Feijóo por sus relaciones con Vox. Es una idea que, sin embargo, solo afirma el 46,4% de los encuestados frente a un 37% que no cree que tenga consecuencias positivas para el PP. Los votantes populares opinan en un 61,5% que sí saldrán favorecidos, mismo parecer en el PSOE, mientras que solo un 28,3% de los afines a Abascal lo piensa y también un escaso 13,9 de Sumar.

Encuesta NC Report
Encuesta NC ReportA. CruzLa Razón

La ruptura de Vox con el PP en Extremadura, Castilla y León, Murcia, Valencia y Aragón deja a los populares en una situación que aboca a los presidentes regionales a tener que llegar a pactos de manera constante para sacar adelante la legislatura y alejar el escenario de unas elecciones anticipadas. Concretamente, Castilla y León y Murcia podrían sufrir una moción de censura sí así lo propone Vox. Ante esta situación, la posición que adopte el PSOE será indispensable para evitar comicios. ¿Debe el PSOE apoyar al PP para facilitar la estabilidad de estos gobiernos autonómicos? Precisamente los socialistas han pedido en multitud de ocasiones que rompieran con Vox en las comunidades, pero sin garantizar después que tendrían el voto de su partido para legislar. La encuesta refleja división de opiniones. Un 45,1 sí reclama una oposición de Estado colaborativa por parte del PSOE, mientras que un 48,5% lo rechaza. Son los votantes populares quienes así instan a los socialistas a dar este paso en un 91,5% de los casos, pero solo un 32,5% de los afines a Pedro Sánchez respaldarían esta acción. Los electores de Vox y de Sumar están de acuerdo en que el PSOE no debe dar la mano al PP.

La inmigración, un problema

La inmigración ha sido la gota que ha colmado el vaso para Vox y el elemento de tensión con el PP para provocar la ruptura definitiva, pero lo cierto es que Vox llevaba tiempo viendo acotado su espacio –sobre todo en Europa ante el auge de la ultraderecha– y más desde las elecciones europeas con la irrupción del partido de Alvise Pérez, que podría ser una gran amenaza para los de Abascal. Ello, unido a la postura antiinmigratoria del partido, que impide a Vox aceptar el reparto de inmigrantes. Para el 74,6% la situación de los menores no acompañados ha sido una «excusa» para romper, mientras que casi el 20% dice lo contrario. El 63,3% de los electores de Abascal también tienen esta sensación, que es mayoritaria en el resto de partidos.

Más allá de los movimientos políticos, la situación de la inmigración en España es un asunto que genera incertidumbre. Y es que hay 5.500 repatriados que colapsan ahora mismo Canarias, una realidad que cada día va a más al arribar todas las semanas en sus costas cayucos. Así un 72,2% cree que la inmigración es un problema en España. Sobre todo afirman esto, los votantes de PP y Vox. Por último, la mitad de la población opina que es un problema acoger a menores migrantes, mientras que un 39,4% no lo ve como un problema.