Investigación

"Caso 3%": el juez exculpa a cargos de Convergencia de financiar de forma ilegal al partido

Pedraz concluye que no existe "indicio alguno" que acredite que se camuflara la entrega de dinero negro a través de donaciones

El tesorero de CDC, Andreu Viloca
El extesorero de CDC, Andreu Vilocalarazon

"No consta indicio alguno que acredite un mecanismo de afloramiento de dinero negro que era aparentemente entregado con carácter previo a la realización de las donaciones por parte de los investigados al partido político CDC, como tampoco que el dinero que se hubiera podido entregar a los militantes tuviera un origen ilícito". Con esta argumentación, el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha archivado tres años después la pieza separada del "caso 3%" en la que se investigaba a varios cargos de Convergencia Democrática de Cataluña por supuestas donaciones para financiar ilícitamente a la formación nacionalista.

El magistrado recuerda que la investigación se abrió en abril de 2020 para esclarecer "las donaciones en metálico verificadas por personas próximas a CDC de fondos que pudieran constituir actos de afloramiento de dinero procedente de delito, con la finalidad de financiar ilícitamente al partido".

Pero, tras la instrucción realizada, no se ha podido acreditar -sostiene- que los imputados idearan y llevaran a la práctica un sistema para que el dinero en efectivo aportado supuestamente para financiar a la extinta CDC pasase "al circuito económico legal utilizando la simulación de una donación".

En noviembre del pasado año, Pedraz abrió juicio oral contra tres extesoreros convergentes -Daniel Osàcar, Andreu Viloca y Germà Gordó-, así como contra la extinta CDC y su sucesor, el PDeCAT, por la supuesta financiación ilegal de CDC entre 2008 y 2015 a través del amaño de adjudicaciones de obras.

Desinfla el informe de la Guardia Civil

Para Pedraz, el informe de la Guardia Civil del pasado abril que detalla la operativa de ingresos en efectivo vinculada a las donaciones, no permite acreditar posibles actuaciones delictivas porque del mismo "no se sigue elemento alguno que avale los hechos imputados", limitándose a realizar "un resumen de la información que habían facilitado las diferentes entidades bancarias sin aportar ningún dato ni alcanzar conclusión alguna que ampare" que siga adelante la instrucción.

Pedraz recuerda que los investigados declararon que las donaciones eran aportaciones "extraordinarias" que les solicitó el partido en su condición de militantes y, sobre todo, por razón de su cargo o por la responsabilidad institucional que ostentaban, alegando "problemas de tesorería". Una explicación que, señala, "no ha quedado desvirtuada".

"No hay base para afirmar que el origen los fondos fuera proveniente de la trama del caso Palau, pues no existe diligencia alguna que lo acredite", asegura el instructor, quien esas donaciones serían por tanto transparentes y cuya información, como apuntaron las defensas, estaba desde hacía años en manos del Tribunal de Cuentas.

El magistrado descarta como indicio delictivo que las donaciones realizadas por los distintos investigados se produjeran coincidiendo con supuestos ingresos en sus cuentas. Pedraz señala que la información contable se ha realizado por duplicado. Por un lado, analizando la base de datos intervenida en 2015 en la sede de CDC por la Guardia Civil; y, por otro, la contabilidad de CDC, lo que ha hecho que una misma donación apareciese en fechas ligeramente distintas, una "duplicidad de fuentes contables" a las que achaca posibles errores en su interpretación.