Cuca Gamarra: «El PP no comparte la alternativa que ofrece Vox»

El fondo de la entrevista son varias discretas fotos institucionales y unas miniaturas de los Beatles. Vive en un despacho sobrio en decoración y con dos mesas cargadas de papeles.

¿Pactaron con Ayuso la puesta en escena de su ruptura con Vox?

En este partido respetamos la autonomía de nuestros presidentes autonómicos, y la presidenta de la Comunidad de Madrid ha actuado conforme a esa independencia. Además, es una decisión lógica ante el bloqueo de Vox a unos presupuestos buenos para los madrileños y a que se crease un marco fiscal atractivo para la inversión, a través de la bajada de impuestos. No creo que nadie haya votado a Vox para que defienda ir en contra de estas políticas.

Y si necesitan a Vox después de las elecciones de mayo, ¿también será «lógico» intentar volver a pactar con ellos?

En política las decisiones se tienen que tomar pensando en el interés general, no desde el oportunismo o desde el tacticismo. Esto es fundamental para que al final los españoles, en este caso, los madrileños, confíen en las instituciones y confíen en sus líderes políticos, confíen mayoritariamente en Isabel Díaz Ayuso.

Precisamente el reproche que se hace a esta decisión es que pueda ser solo táctica, para ir por separado a las elecciones.

El tacticismo es de quien vota en contra de su programa y del interés de los ciudadanos a los que representa sólo para boicotear la acción de un gobierno.

¿Quién hace más daño al PP en estos momentos, Sánchez o Abascal?

Pedro Sánchez es el presidente del Gobierno que más daño está haciendo a España y, por tanto, es a quien aspiramos a cambiar al frente del Ejecutivo. El PP es el único que, además, puede plantear a los españoles un proyecto serio, solvente, moderado y con un liderazgo que esté a la altura de las circunstancias de un gran país como es España, el de Alberto Núñez Feijóo. Nuestro adversario político es única y exclusivamente Pedro Sánchez, que es a quien los españoles necesitan que desalojemos de La Moncloa.

¿Le sorprendió algo de lo que hemos visto esta semana en la moción de censura?

No. Desde el primer momento tuvimos muy claro, y así lo dijimos, que esta moción de censura sólo tenía como objeto utilizar un instrumento constitucional, no con la finalidad que establece la Constitución, sino para reforzar al Gobierno Frankenstein. El interés particular del PSOE y de sus aliados, y no el interés general, es lo que hace que los tornillos del Gobierno Frankenstein estén cada vez más apretados.

El pacto en el CGPJ no se consigue forzando más el daño institucional con dimisiones»

¿Se identificó con alguna parte, al menos, del discurso de Abascal en el Congreso?

Compartimos, lógicamente, una parte de su diagnóstico porque estamos ante un Gobierno que acumula muchos motivos para su censura. Pero no compartimos ni la manera en que lo ha hecho Vox ni tampoco la alternativa que tienen para España. De todas formas, ya lo hemos dicho: serán los españoles los que con su voto censuren a Sánchez en los dos comicios electorales que están previstos para este año. 2023 es el año del cambio político en España.

Visto el resultado, ¿cree que han callado la boca a los que dudaban de la decisión de Génova de abstenerse en la moción?

Nuestro objetivo era demostrar a los españoles que hay otra política posible que no utiliza las instituciones, sino que las respeta. Que hay otra forma de hacer política, una política de adultos, y sobre este objetivo tomamos todas nuestras decisiones. Somos un partido autónomo, tenemos nuestro propio camino.

¿La política que hace Vox no es de adultos?

No es responsable utilizar las instituciones o los instrumentos constitucionales, como el de una moción de censura, buscando la proyección política porque estás en horas bajas y quieres lanzar un balón de oxígeno al Ejecutivo.

¿Le molesta que la izquierda diga que PP y Vox son lo mismo?

Es una mentira más de la izquierda para intentar consolidar una política de bloques en la que nosotros no creemos. En el PP creemos en la política que es capaz de sumar a españoles diferentes, iguales en derechos y oportunidades, en una España plural de más convivencia, de más acuerdo y, sobre todo, en la que no se utilice el Gobierno para jalear la división y el enfrentamiento.

¿Qué le parece el gesto de Sánchez de ceder protagonismo en el debate de la moción de censura a su vicepresidenta, para señalarla así como candidata a la Presidencia del Gobierno?

Otra utilización del Congreso y de un instrumento constitucional para fines partidistas, en este caso para romper a Podemos.

Desde Podemos critican a Sánchez por lo mismo que los socialistas criticaban a Iglesias, por entender que es un gesto paternalista, incluso un poco machista, eso de señalar con el dedo a Yolanda Díaz como la elegida ¿Cree que Iglesias y Sánchez se hubieran comportado igual con un hombre?

Hay tics que demuestran que hablan mucho de igualdad, pero luego, a la hora de la verdad, pecan de lo que critican en los demás.

¿Son machistas?

Pecan de lo que critican, como le he dicho.

Hay nueva ampliación de enmiendas en la reforma de la ley del "solo sí es sí", para detener las excarcelaciones de agresores sexuales, porque el PSOE busca un acuerdo con sus socios. ¿El PSOE podrá seguir, en todo caso, contando con sus votos?

El PP ya presentó en diciembre su propuesta de reforma de la ley y el PSOE la paralizó. Y cerca ya del mes de abril todavía siguen perdiendo el tiempo por razones de interés de partido y porque están presos de la mayoría Frankenstein. Pero nosotros solo daremos nuestros votos a una reforma que no cambie en nada el Código Penal anterior a la nefasta ley del Sí es Sí; es decir, que no vuelva a rebajar penas a violadores, pederastas y agresores sexuales. El PSOE debe cumplir el compromiso de que se tramite de manera urgente. Es indecente, y una falta de respeto a las mujeres, que Sánchez siga perdiendo el tiempo en un tema tan grave como éste sólo porque sobre las mujeres prioriza el acuerdo con sus socios. Si se modifica la proposición de ley, el PP reconsiderará su posición porque, insisto, nuestro apoyo es única y exclusivamente para dejar el Código Penal tal y como estaba. Nuestro compromiso es con las españolas y con los menores que son víctimas de los agresores, no con los violadores ni con los agresores sexuales.

¿Y si el pacto con sus socios es sólo de matices? ¿Mantendrán sus votos, aunque no fueran ya necesarios?

En este tema no hay matices. Estaban advertidos de lo que iba a suceder, y tiraron hacia adelante porque pensaron que la sociedad no iba a reaccionar como lo ha hecho. Solo ante el coste electoral decidieron rectificar, pero siguen anteponiendo su interés de partido al interés de las mujeres y de las víctimas de agresores sexuales.

Lo que planteaba era que si se introdujeran solo cambios cosméticos para sumar a Podemos, ¿podrían votar con los morados una reforma de una ley que en su totalidad no comparten?

Este tema es blanco o negro. Y nosotros sólo estamos para garantizar que se vuelve al Código Penal vigente hasta ahora y que no se rebaje ningún tipo penal. El PSOE tiene que explicar por qué está retrasando la reforma para que no se beneficien los violadores de la ley que ha aprobado el Consejo de Ministros, que preside Sánchez. Y también tiene que aclarar qué está negociando con Podemos.

Usted se siente feminista…

Sí, por supuesto.

¿Y cómo calificaría el feminismo que se practica desde el Ministerio de Igualdad?

Eso no es feminismo, es propaganda ideológica. Han confundido las pancartas con las políticas reales para hacer que la sociedad avance de verdad en la igualdad entre hombres y mujeres. Nosotras no necesitamos hoy campañas de publicidad. Lo que las mujeres seguimos necesitando es que se nos ayude a avanzar en la conciliación, en eliminar la brecha salarial y en conseguir entre todos, sociedad, familia y escuelas, que ninguna niña piense que tiene delante algún límite para conseguir lo que desea. También seguimos necesitando avanzar en erradicar la violencia de género, que en esto, como en todo lo demás, hablan mucho, pero no están mejorando nada. Feminismo no es ni llevar una pancarta ni repartir carnés de buenas feministas, que es en lo que han convertido el Ministerio de Igualdad.

¿Cómo cambiaría el PP este modelo?

En primer lugar, reformando y derogando todas esas leyes que están haciendo tanto daño desde el punto de vista de la ingeniería social. Y, además, haciendo que la política en materia de igualdad vuelva a ser una política adulta, seria y responsable, que cuente con el respaldo de la sociedad española y que esté basada en la responsabilidad y no en alimentar el enfrentamiento entre hombres y mujeres. No hay que repartir carnés, sino trabajar por corregir las diferencias.

La ley trans, ¿derogarla o reformarla?

Se necesita una ley trans, pero no esta ley trans. Hace falta una ley trans que respalde a los menores y no borre a las mujeres.

¿El PP se sentirá más obligado a buscar un acuerdo «in extremis» para renovar el CGPJ si hay una dimisión en bloque del sector progresista? Hay un Pleno convocado esta semana y parece que es en lo que anda trabajando el vocal Álvaro Cuesta, ex diputado socialista. Moncloa ya defendió en el pasado la idea de la dimisión.

El Gobierno no tiene ningún tipo de límites y es capaz de deteriorar absolutamente todas las instituciones, todo lo que toca. Pedro Sánchez solo sirve para dividir, enfrentar y deteriorar. Así lo ha hecho con el Tribunal Constitucional, donde ha colocado a un ministro de su Gobierno y a una asesora de su Gobierno. Y con estas presiones de última hora sobre el Poder Judicial sólo contribuyen a deteriorar más al órgano de gobierno de los jueces.

¿No se sentirán obligados entonces a negociar si hay una dimisión en bloque de los progresistas y ya no hay quórum ni para que se convoque el Pleno?

Los acuerdos no se consiguen forzando todavía más el deterioro de las instituciones. Eso es una absoluta irresponsabilidad. Y el deterioro, en este caso del Consejo General del Poder Judicial, empezó con la primera de las reformas que llevó a cabo Pedro Sánchez, quitándole competencias y haciendo que en el Consejo no pueda llevar a cabo los nombramientos de las vacantes que hay en el Tribunal Supremo, en la Audiencia Nacional y en las Audiencias provinciales. Eso es lo que bloquea la Justicia.

Antes de esa reforma ya había un bloqueo, que nació con el arranque de esta Legislatura y que impuso quien entonces era el líder de su partido.

Nosotros planteamos al PSOE un acuerdo para avanzar en la línea que pide Europa y conseguir una mayor independencia del Poder Judicial. Y esa propuesta sigue plenamente en vigor. Pero, sin embargo, lo que vemos es cómo desde Moncloa no trabajan en esa meta de ganar en independencia, sino que están dedicados a convencer a los miembros del Consejo General del Poder Judicial para que actúen en dirección de bloquear aún más el trabajo del Consejo. Por ese camino ni se acuerda ni se avanza en la regeneración.

¿No cree que daría más fuerza a la crítica que hacen ahora al Gobierno el hecho de que aceptasen su cuota de responsabilidad en la crisis a la que se enfrenta el Poder Judicial?

Insisto, el bloqueo es consecuencia de las dos reformas que ha impulsado el Gobierno con la ayuda de sus socios.

Cataluña: Dicen que Feijóo ayuda a que el PP tenga hoy mejor entrada, pero en la derecha hay quien recela de que se abandonen batallas como la de la lengua.

Nuestro modelo es el bilingüismo cordial, la convivencia de las lenguas, pero desde el respeto a la ley. Nuestras políticas y nuestros hechos son conocidos: hemos llevado al Constitucional todo lo relacionado con que no se cumpla la obligación legal de un 25% de enseñanza en castellano, y de ahí no nos movemos. Ahora bien, la defensa del castellano como lengua vehicular, la defensa de los derechos lingüísticos de todos los catalanes, la hacemos desde el convencimiento de que las lenguas no dividen, sino que deben unirnos porque son parte de nuestra riqueza como país.

«Si el PSOE cambia la reforma de la ley del Sí es Sí para pactar con sus socios, no la apoyaremos»

Si llegaran a gobernar, ERC no se tomaría como un gesto muy cordial que exijan que se cumpla ese 25% en castellano. Y buena parte de la sociedad catalana, probablemente, tampoco

La cordialidad significa respeto a las lenguas, pero en el marco del cumplimiento de la ley, eso es incuestionable. Feijóo hará que se cumpla la ley, pero no va a utilizar las lenguas como un elemento de enfrentamiento entre ciudadanos porque, como acabo de decir, deben de ser un elemento de pluralidad y de respeto. ERC tendrá que acostumbrarse a que no están por encima de la Ley por mucho que Sánchez les haya dado impunidad para estar en Moncloa.

¿A cuánto está dispuesto a renunciar el PP para conseguir ser un partido de mayorías?

A nada, todo lo contrario. Un proyecto de mayorías, que es lo que ofrecemos a los españoles en estas próximas elecciones, se sostiene en los principios básicos de nuestro ideario: en la convivencia y en superar la política de bloques que ha llegado de la mano del populismo y que se ha asentado con el «sanchismo» en nuestro país. Con el proyecto de una España de mayorías buscamos aglutinar una mayoría suficiente para poder gobernar de la mano de Alberto Núñez Feijóo con estabilidad, con seguridad y, sobre todo, con mucha tranquilidad y sumando incluso a aquellos que no nos han votado nunca, pero que hoy no quieren que se consoliden las dos Españas de Sánchez.

¿Y el PP podría entonces entenderse con el PSOE?

Queremos recuperar las políticas de Estado que Sánchez ha desterrado, y estas políticas de Estado por supuesto que significan hablar con el líder de la oposición. Esto llegará con un PSOE sin Sánchez. España necesita volver a las políticas de Estado, que tienen que contar con consensos amplios porque no son políticas de legislatura, son políticas que tienen que consolidarse para que tengan una proyección a largo plazo y deben ser compartidas por la mayoría de los españoles. La etapa de no comunicación entre el presidente del Gobierno y el líder de la oposición que ha implantado Pedro Sánchez debe ser superada, y así lo haremos en ámbitos como la política Exterior, la política de Defensa, el terrorismo o la lucha contra la violencia de género.

Los presidentes Aznar y Rajoy representan el compromiso con la unidad del PP»

¿Cómo han logrado que los ex presidentes Aznar y Rajoy vuelvan a hablarse?

Siempre se han hablado.

¡Pero si llegaron a no poder estar en un mismo acto juntos, y ahora se les ve posando casi de la mano al lado de Feijóo!

Tanto el presidente Aznar como el presidente Rajoy representan el compromiso con España y con la unidad del Partido Popular.

«Con Ayuso hay diálogo, respeto y buena sintonía. Cuenta con nuestro respaldo absoluto»

¿Y con Ayuso? ¿Qué ha cambiado para que ahora sí sea posible la convivencia entre la dirección nacional y el equipo de Sol?

Hay diálogo, respeto y muy buena sintonía. Isabel Díaz Ayuso es un capital político fundamental en el partido, y sabe que cuenta con el respaldo absoluto de la dirección nacional.

Después de que se hayan cerrado todas las investigaciones sobre el hermano de la presidenta madrileña, ¿se equivocó la anterior dirección, el anterior presidente, cuando dio pábulo a las informaciones contra ella? Llegaron a anunciar hasta su posible imputación para justificar aquella campaña.

Ha quedado claro que no hay «caso Ayuso» No sólo no hay caso, no había caso, no hay caso y no habrá caso, por mucho que la izquierda siga intentándolo. Donde sí hay casos, y muchos, es en el Partido Socialista, empezando por Ximo Puig, que tiene que dar muchas explicaciones.

¿A qué se refiere?

Trama Azud y demás casos sobre los que investiga la Justicia.

Las cifras de crecimiento económico siguen revisándose al alza. Esto, ¿qué le dice?

Las cifras confirman la resistencia de la sociedad española ante las malas políticas de Pedro Sánchez. El PP quiere que a España le vaya bien, ésa es nuestra razón de ser y para lo que trabajamos. Y ya lo hemos demostrado: cuando el PSOE gobierna y deja a España en la quiebra, siempre llega el PP para solucionarlo. Pero tenemos también la obligación de contar lo que se esconde detrás de algunas cifras. Somos el único país de Europa que todavía no ha recuperado su PIB pre pandemia y eso es consecuencia de unas políticas que no están funcionando.

Éste será el año de los fondos europeos...

Los fondos europeos no están llegando a la economía real, a las familias y a los empresarios. Y esto es responsabilidad del Gobierno.