Crisis en la derecha

PP y Vox rompen en Aragón antes de empezar a negociar los Presupuestos

Las dos formaciones rompen antes de empezar a negociar las cuentas públicas y abocan a la región a un bloqueo económico que se podría dirimir en las urnas

ZARAGOZA, 21/10/2025.- El vicesecretario de Política Autonómica, Municipal y Análisis Electoral del PP, Elías Bendodo (i), atiende a los medios de comunicación junto al presidente del PP de Aragón, Jorge Azcón (d), antes de su reunión con miembros del grupo parlamentario, este martes en Zaragoza. EFE/ Toni Galán
Jorge Azcón, este martes en un acto del PP, con Elías BendodoToni GalánAgencia EFE

"El Partido Popular de Aragón lamenta que el Grupo Parlamentario de Vox en las Cortes autonómicas reaccione de forma irreflexiva e impulsiva sobre un asunto trascendental como es la negociación del presupuesto de la Comunidad Autónoma", reza el primer párrafo del comunicado que en la tarde de hoy ha enviado el equipo de Jorge Azcón, presidente del Gobierno de Aragón, a la prensa.

Entretanto, en la nota de Vox: "El grupo parlamentario de Vox no va a sentarse a negociar ningún acuerdo presupuestario con el Gobierno de Aragón del Partido Popular para 2026. El Partido Popular tendrá que negociarlos con quien esté dispuesto a aceptar órdagos oportunistas y mezquinos".

Las relaciones entre ambos partidos han saltado por los aires por el controvertido papel de un asesor que el partido verde tenía, hasta hace horas, en las Cortes regionales. Marcos Francoy. En sus redes sociales, publicaba mensajes en los que pedía, por ejemplo: "Remigrar a todos los no españoles de sangre y promover políticas que permitan la natalidad de los españoles autóctonos".

Para Azcón, la permanencia de este asesor suponía una línea roja infranqueable a la hora de sentarse a negociar las cuentas públicas. A priori, Vox se negó a cesarlo: "Se trata de una cuenta personal y no representa el posicionamiento del grupo parlamentario. Quienes representan al grupo son únicamente los diputados electos". Pero, finalmente, el partido ha reculado.

"La semana pasada, Vox ya se puso en contacto con la gestoría correspondiente para iniciar los trámites y pasos previos imprescindibles a la hora de tomar la decisión de prescindir de los servicios de Marcos Francoy como asesor del grupo parlamentario en las Cortes de Aragón. Este cese viene motivado por la pérdida de confianza en el asesor. Una circunstancia que venía agravándose a lo largo de los últimos meses", asegura la formación en la nota enviada este martes a los medios.

Sin embargo, la exigencia planteada por Azcón no ha sentado nada bien. De ahí que la decisión final sea dar por rotas las relaciones antes incluso de iniciar una negociación presupuestaria. Con órdago incluido: "En un hipotético escenario en el que el Partido Popular solicite el futuro apoyo de Vox para conformar una mayoría que permita la investidura de un presidente y su correspondiente ejecutivo, Vox incluirá en esta negociación el hecho de supervisar y dar el consentimiento a todo personal eventual que forme parte de las consejerías dirigidas por el Partido Popular".

Los populares. ante la consecución de hechos, se muestran sorprendidos: "Resulta como mínimo desconcertante que anuncien su negativa a una posible negociación justo después de haber cesado al asesor que difundía mensajes fascistas y racistas en redes, que es la condición sine qua non reclamada por el Partido Popular de Aragón para poder mantener conversaciones institucionales".

En las filas de Azcón consideran "lamentable" que la formación verde pegue semejante espantada "para defender la posición de un asesor que ha mostrado en redes sociales una ideología incompatible con la democracia". A pesar de que los puentes quedan resquebrajados, los populares hablan de "reacciones airadas" y de "pataletas" y emplazan a Vox a "hacer política desde la responsabilidad, la sensatez y la seriedad".

De momento, la ruptura entre PP y Vox aboca a Aragón a un bloqueo presupuestario que, quién sabe, podría dirimirse en las urnas. En el entorno de Azcón aseguran que no hay nada decidido y que "no tiene por qué" haber adelanto. Pero dos prórrogas presupuestarias consecutivas dificultan, y mucho, la continuidad de la legislatura.