Prisión Permanente Revisable

Oposición (permanente) revisable

Izquierda e independentistas tumban en el Congreso las enmiendas de PP y Cs.

La portavoz del PSOE en el Congreso, Margarita Robles
La portavoz del PSOE en el Congreso, Margarita Robleslarazon

Izquierda e independentistas tumban en el Congreso las enmiendas de PP y Cs.

Bronco debate sobre la prisión permanente revisable en el Congreso de los Diputados. La iniciativa del PNV para derogarla seguirá su curso después de que se rechazaran en Pleno las enmiendas a la totalidad presentadas por el PP y de Ciudadanos que apostaban por mantenerla retocando algunos puntos.

En la votación, los textos alternativos del PP y de Ciudadanos fueron rechazados por 178 diputados de PSOE, Unidos Podemos, ERC, PNV, PDeCAT, Compromís, Bildu y Nueva Canarias, mientras que la diputada de Coalición Canaria, Ana Oramas, optó por abstenerse al considerar que su voto no era decisivo. La proposición de ley del PNV supera así su segundo debate de totalidad en el Pleno del Congreso. El primero tuvo lugar en octubre del pasado año, en su toma en consideración, donde doblegó el rechazo del PP con los votos de los mismo partidos más la abstención de Ciudadanos.

La enmienda de los populares proponía ampliar los supuestos de aplicación de la prisión permanente. El secretario general del Grupo Popular, José Antonio Bermúdez de Castro indicó que dicha iniciativa no apuesta por la venganza sino por «justicia para proteger a los más vulnerables» de los crímenes más detestables, «algunos de los cuales han vuelto a sacudir nuestras conciencias», en alusión a la muerte de Gabriel. El PP retó a los diputados del PSOE: «Mire» a los familiares de las víctimas a los que se aplicaría la prisión permanente y trate de convencerles de que están equivocados y que este tipo penal debería ser derogado.

Por su parte, Ciudadanos abogó por limitar el acceso a los beneficios penitenciarios y destacó que «lo sensato no es derogar sino que el Tribunal Constitucional sea quien establezca las limitaciones y dibuje el marco de juego», defendió su portavoz Juan Carlos Girauta.

La oposición criticó los vaivenes de la formación naranja que tildaron de «visos de oportunismo e inconstitucionalidad», hacer «populismo del sarcasmo» o moverse a golpe de encuesta y le recordaron cómo, cinco meses antes apostaron por derogar la prisión permanente e incluso llegaron a rubricarlo en el pacto de investidura de Pedro Sánchez.

La tensión se elevó cuando el diputado socialista, Juan Carlos Campo, acusó a PP y Cs de «utilizar» a las víctimas y su dolor. Pero la contienda dialéctica se aumentó aún más: «Sin prisión permanente vencimos a ETA y con ella hemos tenido la muerte del niño Gabriel, no está ahí el problema». Desde la tribuna los padres de Diana Quer, de Mari Luz Cortes de Yeremi Vargas, los de Marta del Castillo, de Sandra Palo o la presidenta de la Asociación Clara Campoamor, Blanca Estrella asistían indignados a las palabras del diputado socialista. La bancada de los populares protestaba y se revolvía enérgicamente. La presidenta del Congreso, Ana Pastor tuvo que llamar al orden con amenaza incluso de suspender el Pleno. Pero aún quedaba el último dardo: «Deberían preocuparse por todas las víctimas, hay algunas que esperan su apoyo hace 80 años» –trayendo al debate a las víctimas del franquismo–. Los padres de las víctimas no salían de su asombro.

Por su parte Podemos aseguró que defenderán «la derogación de la prisión permanente en todas partes, no vamos a callar ni vamos a pedir perdón» por ello. «Ustedes hacen depender el cumplimiento de los derechos humanos de las encuestas». Mientras la diputada podemita Carolina Bescansa escribía en Twitter: «Pido perdón a las víctimas, a sus familiares, a la sociedad española por no haber sabido tener un debate a la altura de su dignidad». Otro diputado de la bancada morada, Raimundo Viejo de En Comu-Podem tuiteaba que se permitiera romper la disciplina de voto.

La Mesa del Congreso decidierá en su reunión del próximo martes si se siguen ampliando los plazos de enmiendas al articulado de la iniciativa del PNV. Los principales grupos son partidarios de no acelerar la tramitación hasta que se pronuncia el TC.