La sala de lo social del TSJ de Murcia ha ratificado la incapacidad permanente total de una peón agrícola tras una picadura de abejorro en el año 2021 que le causó una reacción anafiláctica y aborto.

La trabajadora, peón agrícola en invernadero, presentaba diagnóstico de esa hipersensibilidad, y en mayo de 2021 sufrió una picadura mientras trabajaba, que desencadenó una reacción anafiláctica con consecuencias ginecológicas graves, ya que sufrió un aborto el mismo día, cuando se encontraba en la sexta semana de gestación.

La relación entre ambos hechos se trata con cautela médica, pero se admite como “muy probable”, señala la Sala, que añade que la trabajadora está, si se la obliga a seguir con su actividad en los invernaderos, donde se utiliza a los abejorros para la polinización, “en situación de muerte potencial o de muy graves consecuencias para su salud”.

Recuerda la sentencia que la empresa, que recurrió la resolución judicial lo mismo que la mutua, no procedió a la recolocación de la trabajadora, sino que optó por la extinción del contrato de trabajo por ineptitud sobrevenida ante la imposibilidad de cambio de puesto de trabajo.

La sentencia no es firme, ya que contra ella cabe recurso de casación para la unificación de doctrina ante la Sala de lo Social del Tribunal Supremo.