Política

Caso Gürtel

Montoro rechaza la «regularización» de Bárcenas

El ministro afirma que no pudo hacerlo a través de empresas interpuestas

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ayer en el Senado
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ayer en el Senadolarazon

«Ni Bárcenas, ni nadie, puede acogerse a la regularización fiscal a través de terceros ni de sociedades pantallas». El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, lo tenía claro. «¿Tan difícil es de entender?», replicaba ayer con cierto tono anodino en el Senado.

«Ni Bárcenas, ni nadie, puede acogerse a la regularización fiscal a través de terceros ni de sociedades pantallas». El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, lo tenía claro. «¿Tan difícil es de entender?», replicaba ayer con cierto tono anodino en el Senado. Y es que en una sesión de control al Gobierno marcada por las ausencias de varios miembros del Ejecutivo, que aludieron a «problemas de agenda», el ex senador del PP, Luis Bárcenas, estuvo más presente que nunca en el hemiciclo. Si bien es cierto que las intervenciones de Montoro en el Senado no dejan a nadie indiferente, ayer, más que nunca se esperaba que fuera rotundo. Y lo fue, pero no como muchos esperaban. Fue el senador socialista José Miguel Camacho quien le reprochó «haber mentido a los ciudadanos de este país» al negar que Bárcenas se hubiera beneficiado de la amnistía fiscal. Y fue el mismo parlamentario el que le preguntó si iba a dimitir por ello. El ministro de Hacienda no sólo no dimite sino que reiteró que «no está acreditado que el señor Bárcenas se haya beneficiado de la regularización fiscal». Eso sí, antes de contestar tachó de «patético» que los socialistas aplaudiesen a Camacho por el simple hecho de «leer bien» una pregunta. Montoro quiso especificar que «Bárcenas, como persona física, no se ha acogido a la amnistía fiscal» y que tampoco aparece como propietario de ninguna sociedad, ni siquiera de Tesedul, que es la que figura en los documentos entregados por el ex tesorero del PP a la Audiencia Nacional. Según el titular de Hacienda, bajo ningún concepto «es posible regularizar a través de interpuestos».

Montoro señaló que este Gobierno es el que trajo las «medidas más duras para luchar contra la corrupción y el fraude fiscal». Y un aviso a Rubalcaba, que ayer por primera vez en esta legislatura presidió la reunión del Grupo Socialista en el Senado. De él, Montoro dijo que ahora «está haciendo la política que a él le gusta». A buen entendedor...

El segundo rifirrafe tuvo lugar entre el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, y el senador del PSC, José Montilla. El tema estrella: la corrupción y el «caso Bárcenas». El socialista intentó minar la figura del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al que culpó de que «nuestra democracia sea más débil». El titular de Justicia contrarrestó con una defensa vehemente de su jefe de filas: «Todos los ministros y todos los senadores del PP estamos absolutamente convencidos de la honestidad y responsabilidad y orgullosos del presidente del Gobierno».

Y si hablamos de medidas, Ruiz-Gallardón le enumeró unas cuantas: la reforma de la Ley de Financiación de Partidos –que ahora obliga a publicar las cuentas–, la modificación del Código Penal –que incluye la «sanción por ocultación, simulación y falseamiento»–, la Ley de Transparencia o el control sobre las donaciones. Aunque, para Ruiz-Gallardón, haber conseguido una Fiscalía Anticorrupción que trabaja con «absoluta autonomía» y la «independencia de los tribunales es la mayor aportación de este Gobierno.