Política

Gobierno de España

“Pactan con los del tiro en la nuca”

La viuda de Puelles y el hijo del policía López Moreno asesinados por ETA denuncian que Sánchez esté «anteponiendo el poder a lo que sea» y piden respeto para las víctimas.

Paqui Hernández, viuda del inspector Eduardo Puelles asesinado en 2011, y Francisco López, hijo del policía nacional asesinado en 1995
Paqui Hernández, viuda del inspector Eduardo Puelles asesinado en 2011, y Francisco López, hijo del policía nacional asesinado en 1995larazon

La viuda de Puelles y el hijo del policía López Moreno asesinados por ETA denuncian que Sánchez esté «anteponiendo el poder a lo que sea» y piden respeto para las víctimas.

Paqui Hernández, viuda de Eduardo Puelles, el inspector jefe de la Policía Nacional que asesinó ETA en junio de 2009, sigue en el mismo sitio donde pasó todo. Dice que es difícil por los «cartelitos», las miradas y porque siempre que pone flores donde explosionó la bomba adosada al coche de su marido, se las destrozan. «Sé que hay gente que quería que me fuera y sé que hay algunos que me miran mal», pero asegura que ella no es quien tiene que marcharse.

El jueves, en un tenso debate en el Parlamento Vasco, un diputado de Bildu llamó «nazis» de Nuremberg y franquistas a los policías y guardias civiles. La viuda de Puelles considera que «si hay que llamar nazi a alguien es a ellos –a los terroristas y los que los apoyan– que han llevado a cabo un exterminio durante años mientras que los policías y guardias civiles lo que hacían era actuar con la ley en la mano». «La Policía no ha asesinado. Mi marido usaba pistola pero ni facilitó asesinatos, ni asesinó a nadie». Hernández lamenta que los políticos rechazaran poner en su día una plaza a Eduardo Puelles para «no herir sensibilidades», dijeron; «cuando lo que hizo fue evitar el asesinato de muchas personas, aunque no pudo evitar el suyo».

A la viuda el Inspector de Policía le sorprende la deriva que está tomando el PSOE apoyándose en los que insultan a los agentes. «Cuando asesinaron a Puelles gobernaba aquí el PSE, Patxi López era el lendakari. Él como persona me parece encantador, pero no entiendo lo de Sánchez, está anteponiendo el poder ante lo que sea» y advierte de que Otegi tiene ahora mucho protagonismo, pero que «cuando quiera dará el hachazo». Considera que están más pendientes de hacer concesiones a los etarras en prisión, acercándolos al País Vasco o excarcelando a presos enfermos y se preocupen más por ellos que por las víctimas. «Mis hijos se quedaron sin su padre y solo pueden ir al cementerio».

La viuda de Puelles lamenta en lo que se ha convertido ahora la política y destaca que «tenemos un país vergonzoso, donde se pueden meter en política los que apoyan a los asesinos y «somos juzgadas» las víctimas. Le sorprende que los políticos pongan más énfasis en frenar en los parlamentos a los corruptos que a los asesinos. «Nos machacan con los que se llevan el dinero, pero no hacen lo mismo con los que tienen delitos de sangre, que han asesinado a mujeres embarazadas, a niños...». Sobre la ley de víctimas de violencia policial que aprobó el Parlamento Vasco con el apoyo de PNV y PSE, y los votos en contra del PP, recuerda que «hay que defender los derechos humanos de aquellos a los que matan». La viuda de Puelles considera que «mi marido está muerto gracias a muchos políticos que no les dotaban de materiales ni medios adecuados».

Sin resolver

Francisco López tenía 13 años cuando asesinaron a su padre, Eduardo López Moreno, policía nacional destinado en Etxalar (Navarra), con una bomba en una casa cuartel abandonada. Por la mañana habían intentado asesinar a Aznar.

López, tilda de «imagen bochornosa» los insultos que desde el Parlamento Vasco se profirieron el jueves contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y «con un Urkullu de brazos cruzados, impasible ante lo que estaba ocurriendo, algo que refleja lo que se ha vivido en los últimos años en la política vasca», destaca. «Teniendo en cuenta que han asesinado a todos los que no pensaban como ellos, llamar nazis a los que asesinaban es incomprensible».

La ley de víctimas de violencia policial le parece «una aberración». Destaca que «los supuestos abusos policiales los tiene que juzgar los tribunales y ya lo hicieron, pero no el Parlamento Vasco que lo que hace es actuar de facto como un tribunal». Le resulta «curioso» que «el PSOE se preste a esto, cuando no deberían negociar nada con los del tiro en la nuca».

El asesinato de Eduardo López es uno de los más de 300 crímenes sin resolver. La etarra Iratxe Sorzabal, a la que la Audiencia le atribuye la autoría, cumple condena en Francia por otros delitos y el causa sigue abierta. «Lo que debería hacer el Parlamento Vasco es poner medios para que se esclarezcan los crímenes como el de mi padre».