C.S. Macías

Rivera levanta el veto al PSOE y abre la puerta a pactar con Sánchez tras el 10-N

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, abre esta posibilidad siempre y cuando el líder socialista asuma un decálogo de reformas de calado que incluye frenar al presidente de la Generalitat, Quim Torra

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, protagoniza este sábado el pistoletazo de salida de la precampaña de su partido con un encuentro ciudadano en Madrid / Foto: EFE-David Fernández
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, protagoniza este sábado el pistoletazo de salida de la precampaña de su partido con un encuentro ciudadano en Madrid / Foto: EFE-David Fernándezlarazon

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, abre esta posibilidad siempre y cuando el líder socialista asuma un decálogo de reformas de calado que incluye frenar al presidente de la Generalitat, Quim Torra.

Cambio de rumbo. El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, en un acto de precampaña bajo el lema de «España en marcha», sin las siglas del partido, levantó el veto a Pedro Sánchez porque hay que superar la parálisis y la falta de acuerdos posterior a los anteriores comicios generales, y la política «debe ser útil otra vez». Para ello llamó a todos los partidos a «recapacitar», tanto «los que bloquearon» la formación de un nuevo Ejecutivo –entre los que incluye al PSOE–, como «los que intentamos sacar al país del bloqueo»; ahora «hay que mojarse», aseguró.

Para Rivera su primera opción será pactar con el PP, si los resultados electorales lo permiten, buscará formar un gobierno de coalición «en un mes».

El líder de Ciudadanos entra en precampaña con la idea de ganar y gobernar y en todo caso, ser quien lidere la política de los pactos. Ya lo intentó «in extremis» en el tiempo de descuento antes de que se convocaran de nuevo las elecciones del 10-N lo que algunos interpretaron como «márketing» preelectoral; y del «no es no» que le dio a Sánchez, pasó al apoyo con tres condiciones. Ahora, si los españoles deciden que sea el PSOE quien gobierne y envían a Cs a la oposición apoyará a Sánchez si asume las «reformas de Estado» que plantea el partido naranja recogidas en un decálogo. «Me comprometo a convencer al PSOE de que rectifique, de que vuelva al constitucionalismo, al consenso y a los grandes pactos de Estado, de que vuelva a sentarse con nosotros para apoyar o para liderar, dependiendo de lo que digan los españoles, estas reformas», tras enumerarlas.

Y en esas reformas apuesta por apoyar la natalidad y a las familias, un sistema eduactivo y no 17 mediante el pacto por la educación, impulsar una tarjeta sanitaria única, poner en marcha medidas para dar respuesta a la España vaciada «que está esperando soluciones». Tolerancia cero con la corrupción y limpiar las instituciones de enchufados entre los que incluyen un CIS independiente. «Ya basta de tener a personas con carnet de partidos dirigiendo la televisión pública o el CIS». Bajar impuestos a las familias, unas pensiones dignas para los jubilados, un plan nacional contra la precariedad en el trabajo así como un nuevo sistema electoral son algunas de las medidas.

El último punto del decálogo de prioridades de Cs es trabajar por «la unión, la libertad y la igualdad» en una España con diversidad pero sin «privilegios» para ningún territorio. «No puede haber diferencias ante la ley» y «ningún político arbitrario y golpista puede menoscabar nuestras libertades y derechos», indicó Rivera en alusión a los partidos independentistas catalanes.El líder de Cs aseguró que defender la Constitución y la igualdad entre los españoles «no se hace con eslóganes de última hora como el de “Ahora España” ni con demoscopia, ni con giros», sino «poniendo encima de la mesa lo que nos une».

La postura del «no es no» a Sánchez hizo que algunos miembros de Cs abandonaran el partido. Sin embargo, el giro estratégico de los naranjas ha sido visto por esos críticos con alivio. Juan Carlos Bermejo -que se presentó en las primarias contra Rivera y contra Aguado– consideró que «a todos los que nos invitaron a formar otro partido, estamos de enhorabuena, nuestro presidente nos ha dado la razón. Lamentablemente esto podía haberse hecho antes, cuando sumaban 180 diputados» indicó a LA RAZÓN. «Ahora deben ser los ciudadanos los que solucionen el problema que nosotros no supimos resolver tras el 28-A».

Sobre Cataluña, Rivera reclamó al PSOE que «no se puede ser casco azul entre los demócratas y los que defienden la violencia», los que quieren saltarse la ley y romper la unidad de España, dado que han decidido abstenerse en la moción de censura que presentaron contra Torra.