Gobierno de España

Sánchez no hará nuevas ofertas a Podemos ni hay contactos con PP y Cs

No hay contactos ni con PP ni con Ciudadanos y desde Moncloa resuelven que si el resto de fuerzas «quieren replicar, que lo hagan en el pleno de la próxima semana».

José Luis Ábalos se reunió ayer con Joan Baldoví (Compromís) para seguir tejiendo apoyos de cara a la sesión de investidura de la próxima semana. Foto: Alberto R. Roldán
José Luis Ábalos se reunió ayer con Joan Baldoví (Compromís) para seguir tejiendo apoyos de cara a la sesión de investidura de la próxima semana. Foto: Alberto R. Roldánlarazon

No hay contactos ni con PP ni con Ciudadanos y desde Moncloa resuelven que si el resto de fuerzas «quieren replicar, que lo hagan en el pleno de la próxima semana».

Visto para sentencia. La investidura de Pedro Sánchez de la próxima semana tiene todos los tintes para acabar como agua de borrajas, dejando para la recuperación de septiembre una segunda oportunidad, siempre que para entonces algún partido varíe su posición. Ya sea Podemos, enrocado en la defensa de su líder, o ya sean Ciudadanos –algo inverosímil en la actualidad– o el Partido Popular, quién nunca ha cerrado la puerta a tener una postura de Estado ante una inminente convocatoria electoral. El presidente en funciones y candidato socialista a la Presidencia del Gobierno no va a mover más piezas con Podemos. Mientras Sánchez da por cerrada la negociación tras el rechazo de su última oferta, que consistía en integrar en su Gabinete a miembros «cualificados» de Podemos, el líder morado ha lanzado a los suyos reclamando una nueva propuesta por parte del candidato Sánchez, negándose a dar por concluida la negociación que se rompió cuando Pablo Iglesias calificó la propuesta de Sánchez de «idiotez».

A la espera de la entrevista que hoy conceda Sánchez a «La Sexta», las posiciones están enconadas. «Se ha perdido la confianza, toda confianza», apuntan fuentes socialistas. Estas mismas fuentes consideran que la propuesta «de imposición» de Iglesias es tanto como que «sea el Secretario General de Podemos quién designe a los ministros y no el presidente del Gobierno». Fuentes de Moncloa afirman que «el presidente está volcado en el discurso» y niegan cualquier posibilidad de ofertas a ninguna formación política. «Si quieren replicar que lo hagan en el pleno de la próxima semana», apuntan. De hecho, fuentes socialistas son contundentes «no ha habido ningún contacto ni con el PP ni con Ciudadanos».

Los partidos minoritarios han pedido a PSOE y Podemos que reduzcan la tensión y no rompan la negociación. A esta línea se ha sumado el PNV, que ha estado especialmente duro con Pablo Iglesias, en plena coincidencia con ERC que no cierra las puertas a Pedro Sánchez, aunque la intención de su voto sería abstención, lejos del voto afirmativo. ERC se desmarcó de la carta de Joaquim Torra que pedía un voto negativo en la investidura, si Sánchez no se comprometía a realizar un referéndum. «Eso es un debate interno de JxCat», afirmó displicente, Pere Aragonés, vicepresidente de la Generalitat y líder de ERC. El partido republicano tomará su propia decisión este viernes al margen de la postura de Torra, y de Puigdemont, que por otra parte, tampoco es la voz única de Junts per Catalunya, ya que los presos, el PDeCAT y Artur Mas se han mostrado proclives a la abstención.

Ayer, José Luis Ábalos, secretario de organización del PSOE se reunió con Joan Baldoví, diputado de Compromís que le garantizó su apoyo. Ambos salieron satisfechos de la reunión. En este escenario, el PSOE de Sánchez podría sumar 131 votos afirmativos, muy lejos de los necesarios para la investidura, de socialistas, regionalistas cántabros, Compromís y nacionalistas vascos. En esta tesitura, la abstención de Podemos, hoy improbable, no sería decisiva.