Gobierno

Sánchez trabaja para una investidura "exprés" cuando fracase Feijóo

A la espera de culminar la negociación con ERC y Junts, el líder del PSOE aspira a ser investido en el mes de octubre

Málaga (ANDALUCÍA) 02/09/2023. El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, en un acto del PSOE en el hotel NH de Málaga. EFE/ Álvaro Cabrera
El secretario general del PSOE y presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, inicia el curso político en MálagaÁlvaro CabreraAgencia EFE

El PSOE lleva semanas desgastando la posición de Alberto Núñez Feijóo por presentarse a la investidura sin tener atados los apoyos suficientes para superarla. Obvian deliberadamente que Pedro Sánchez hizo lo propio en 2016 para poner en marcha el reloj de la repetición electoral, tras declinar Mariano Rajoy el encargo del Rey. “Es una pérdida de tiempo para los españoles”, insisten una y otra vez los portavoces oficiales de partido y Gobierno ante el “mes en blanco” de negociaciones del candidato del PP. El calendario que tenía por delante Feijóo era endiablado, en cualquier caso: o se sometía a un debate esta misma semana, trasladando la sensación de que la suya era una investidura de mero trámite, o debía esperar más de un mes para hacerlo, porque cualquier otra fecha intermedia, antes del 26 y 27 de septiembre, colocaría automáticamente la fecha de la repetición electoral en fechas navideñas (24, 31 de diciembre o 7 de enero). Con este amplio margen temporal, los socialistas no se van a quedar de brazos cruzados.

Aunque en un principio, tras cerrar el acuerdo de la Mesa del Congreso, Sánchez se vio en condiciones de presentarse a una investidura “pronto”; después se optó por evitar el choque institucional y no poner en un compromiso a la Zarzuela, pujando por cortarle el paso a Feijóo, como fuerza más votada. En ese momento, el PSOE tampoco estaba en condiciones de garantizar un respaldo mayor que los 172 votos del candidato popular, aunque sí tuviera la expectativa de llegar a reeditar los 178 que avalaron a Francina Armengol. En la sala de máquinas socialista ponderaron la oportunidad que suponía para sus intereses ceder el paso a Feijóo e incluso darle todo el tiempo que él precisase para, en paralelo, seguir trabajando su propia aritmética sin la presión del foco mediático ni el protagonismo de tener el encargo real. Un foco que, creen, acabará por “achicharrar” al candidato del PP ante su incapacidad para sumar un número de adhesiones suficientes para superar el trámite parlamentario.

“No hay tiempo que perder”, señalan fuentes socialistas, que ya trabajan para una investidura “exprés” de Sánchez, una vez que fracase el intento de Feijóo. Todo dependerá, claro está, del avance y devenir de las negociaciones con ERC y Junts, pero la expectativa de Moncloa es que el presidente recupere sus plenas facultades en el mes de octubre.Superadas fechas más simbólicas para el independentismo, como la Diada del 11 de septiembre o el aniversario del referéndum del 1-O, se buscará el encaje entre otras citas destacadas de ese mes con tiempo para una nueva ronda de consultas con el Rey. La semana del 16 de octubre se antoja como la propicia para ubicar el debate. Antes, el presidente en funciones ejercerá de anfitrión de la doble cumbre de Granada, los días 5 y 6 de octubre, en la que se congregarán por un lado la reunión de la Comunidad Política Europea y, por otro, el Consejo Europeo informal. La siguiente semana se celebra el Día de la Hispanidad con toda la liturgia que lleva aparejada, desfile militar y posterior recepción en el Palacio Real, por lo que también parece incompatible con el debate de investidura.

Que Sánchez pueda culminar el mes de octubre como presidente también tiene una lectura en clave institucional. El próximo 31 de octubre, la Princesa de Asturias cumple la mayoría de edad yestá pendiente el acto de jura de la Constitución que se debe celebrar en las Cortes. Atendiendo al único antecedente que existe, el de su padre, la idea sería realizar la ceremonia ese día, aunque no existe obligación legal para ello, pero que ya existiera un Gobierno con plenas facultades despejaría cualquier impedimento.

La batalla que el PSOE ha emprendido por pelear la revisión de los votos nulos del voto exterior en la Comunidad de Madrid, en el que perdieron un diputado en favor del PP, demuestra lo ajustado de la aritmética que debe ahormar Sánchez. Un escaño más haría que Junts pasara del necesario voto positivo a que fuera suficiente su abstención. Esta correlación de fuerzas puede conseguirse también si los socialistas atraen a Coalición Canaria a la mayoría de la investidura. En caso de no hacerlo, Sánchez sería investido con mayoría absoluta, por 178 votos (11 más que en 2020), los mismos que hicieron a Armengol presidenta del Congreso. De este modo, el líder socialista acudiría al Consejo Europeo del 26 y 27 de octubre en Bruselas con plenas funciones.