Cataluña

Torra presidirá un Govern con Puigdemont y su círculo en el poder

El ex presidente dirigirá el Consell de la República para «desarrollar el mandato del 1-O».

La diputada de JxCat Elsa Artadi, junto al candidato a la presidencia, Quim Torra, el pasado sábado en el Parlament
La diputada de JxCat Elsa Artadi, junto al candidato a la presidencia, Quim Torra, el pasado sábado en el Parlamentlarazon

El ex presidente dirigirá el Consell de la República para «desarrollar el mandato del 1-O».

Quim Torra se convertirá hoy en el 131 presidente de la Generalitat, el primer independiente en el Govern tras la restauración de la autonomía. Un abogado y editor sin carnet de partido, designado a dedo y que dirigirá de forma interina un Ejecutivo donde los afines a Carles Puigdemont tendrán un papel protagonista. ERC, por su parte, busca acentuar su perfil social con las carteras de Educación y Sanidad, que acaparan hasta el 80% del presupuesto.

El principal brazo ejecutor de Carles Puigdemont en Cataluña será Elsa Artadi, la diputada más próxima al líder de Junts per Catalunya. Encargada de la coordinación interdepartamental durante la anterior legislatura
–un puesto clave en los interiores del Palau dada la convivencia entre el PDeCAT y ERC– ahora encabeza el nuevo círculo de confianza del ex presidente junto a Josep Rius (responsable de la Oficina del President) y Jaume Clotet (de Comunicación).

Para Puigdemont quedará reservado el control simbólico del Govern desde el exterior con el denominado Consell de la República, un sostén para mantener la cuota de atención mediática desde el exterior. La ANC pide incluso que se le invista como su presidente para «desarrollar el mandato del 1 de octubre», estar en contacto con la «sociedad civil» y organizar «medidas de presión» contra el Estado. Suyo podría ser el cometido de iniciar el «proceso constituyente» que prometió Torra en el Parlament.

En este sentido, la intención de Junts per Catalunya es que algunos de los dirigentes presos vuelvan a ser consejeros, un gesto simbólico para alimentar la idea de «restitución del Govern». Así, Elsa Artadi podría ser consejera de la Presidència o portavoz del Govern dependiendo de si Jordi Turull , el anterior en el cargo, recupera de forma simbólica su puesto. Sea como sea, Artadi acabará siendo «de facto» la responsable de una de las áreas de más peso político, de la que dependerá la comisión para evaluar los «daños» del 155.

Si Artadi acabara en Empresa por la restitución de Turull, la diputada de JxCat se reservaría el papel de portavoz, un cargo de gran exposición mediática para seguir la línea del discurso de Puigdemont desde Berlín. Damià Calvet y Albert Batet, ambos pertenecientes al círculo de confianza del ex presidente junto a Artadi, también ocuparán parcelas destacadas en el Ejecutivo o en el grupo parlamentario.

En este puzle tendrá especial importancia la figura de Miquel Buch. Todo apunta a que el ex responsable de la Asociación catalana de Municipios y una de las voces más críticas con la dirección actual del PDeCAT encabezará la influyente cartera de Interior, encargada de los Mossos d'Esquadra. A la espera de acabar definir la estructura completa, el PDeCAT se quedaría con Gobernación (Marc Solsona) para preparar el terreno de cara a las elecciones municipales de 2019, el gran objetivo «neoconvergente».

Esquerra asumirá la otra mitad del Govern, la más social. Suyas serán las consejerías de Educación, Sanidad y Bienestar, que acaparan la mayoría del presupuesto y de las políticas públicas con la vista puesta en llegar a consensos con la CUP, los «comunes» e incluso el PSC. Pere Aragonès (Economía) será vicepresidente del Ejecutivo y su hombre fuerte.