Elecciones catalanas

Votar o no votar: esa vuelve a ser la cuestión

Personalidades de diferentes sensibilidades coinciden en que la repetición de comicios es un escenario cada vez más factible. Desde el soberanismo se percibe como una nueva oportunidad mientras que para los constitucionalistas es sinónimo de alargar el «procés».

Votar o no votar: esa vuelve a ser la cuestión
Votar o no votar: esa vuelve a ser la cuestiónlarazon

Personalidades de diferentes sensibilidades coinciden en que la repetición de comicios es un escenario cada vez más factible. Desde el soberanismo se percibe como una nueva oportunidad mientras que para los constitucionalistas es sinónimo de alargar el «procés».

El Gobierno aplicó el 155 con el objetivo de restablecer la normalidad en Cataluña y conducir a la autonomía a unas elecciones que permitieran pasar página al «procés». Cuatro meses después de que se celebraran los comicios del 21 de diciembre, el desafío del independentismo al Estado ha mermado, aunque algunos sectores del separatismo se empeñan en mantenerlo vivo con la investidura de Carles Puigdemont como principal estandarte.

Entre ellos se encuentran el núcleo duro del ex president –formado por un grupo de independientes que integran la lista de JxCat–, la CUP y la Asamblea Nacional Catalana, que, incluso, abrazan abiertamente una repetición electoral si no se permite que Puigdemont sea elegido. Otros sectores, que encuadran a ERC y Òmnium, prefieren evitar más confrontación y formar un nuevo Govern que suprima de inmediato la intervención autonómica. En cualquier caso, los partidos políticos catalanes presentes en el Parlament tienen un mes por delante para investir a un president, si no, el 22 de mayo se convocarán elecciones automáticamente.

Ante esta eventualidad, LA RAZÓN ha conversado con personalidades catalanas de distintas sensibilidades para que ofrezcan su punto de vista acerca del escenario actual. Ellos son el sindicalista de CC.OO., Miquel Salas, en plena polémica por la participación de los sindicatos en una manifestación por la liberación de los presos; el ex presidente de Sociedad Civil Catalana, Ramon Bosch, con buen conocimiento y contacto en la política alemana, lo que le permite mostrarse crítico con la actitud del Gobierno; la catedrática de Derecho Constitucional de la Universidad Autónoma de Barcelona, Teresa Freixes, que se ha convertido en una de las voces más autorizadas en el ámbito político-jurídico aunque algunas de sus reflexiones irriten al independentismo; el portavoz de Tabarnia, Jaume Vives, plataforma que nació como consecuencia del mapa demoscópico que arrojó el 21-D y que ha conseguido una capacidad movilizadora entre el constitucionalismo muy importante; y la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, entidad que se ha erigido en motor del «procés».

Miquel Salas, Pensionista y sindicalista de CC OO: «No es un escándalo volver a unas elecciones»

Para Miquel Salas no debe haber otra salida que no pase por respetar lo que votaron los electores el 21-D, es decir, que el Estado permita la investidura de Carles Puigdemont, Jordi Sánchez o Jordi Turull. Si no, no ve con malos ojos regresar a las urnas: «Se está montando un escándalo porque no haya Govern. La repetición de elecciones no es la opción que más me gusta, pero en España ocurrió y aquí, ahora hay un bloqueo a ciertos diputados para que puedan ejercer sus derechos políticos y sean investidos. Después de una situación de crisis, las dificultades son mayores». A pesar de que muestre evidentes diferencias ideológicas con JxCat, a juicio de Salas, JxCat no tiene ni un ápice de responsabilidad en el actual bloqueo y todo lo deposita en el Estado. A su colectivo, el de los pensionistas, no le está afectando la intervención autonómica porque su fuente de ingresos pende de la Seguridad Social, pero expresa sus quejas por la parálisis de proyectos que se está produciendo. Asimismo, trata de quitar hierro al revuelo que ha envuelto a los sindicatos por manifestarse a favor de la liberación de los presos y asegura que tal y como se están produciendo bajas de afiliados, también se están dando altas». Defiende que el sindicalismo no solo debe ceñirse a la defensa de los intereses de los trabajadores sino también de las libertades democráticas. «En los sindicatos hay posiciones diferentes siempre sobre cualquier cuestión, no somos organizaciones homogéneas», sostiene.

Ramon Bosch, ex presidente de Sociedad Civil Catalana: «Puigdemont sólo piensa en alargar el procés»

Ramon Bosch pronuncia con acento de la baja Sajonia un puñado de cabeceras alemanas del Dep Tagesspiegel al Frantfurter Allgemeine. «Tengo mucho contacto con Alemania y allí, el Estado ha perdido el relato publicado en la prensa y con ello el relato público». Sus amigos periodistas alemanes le cuentan que los independentistas han hecho una gran campaña informativa, envían continuamente mensajes de whatsapp y de telegram para explicar su relato y «cuando sólo recibes información de un bando, por mucha simpatía que tengas por el Gobierno de España, acabas comprando su historia». Es muy crítico con el Gobierno del PP, porque ha descuidado la batalla internacional, y con Ciudadanos, porque no ha sido capaz de enviar un mensaje claro de que la mitad de los catalanes «no estamos a favor de la independencia». Cuatro meses después del 21-D, no esperaba estar sin Govern, y cree que tampoco lo habrá. «Se han dado cuenta de que la independencia es complicada y el único proyecto que tienen es prolongar el proceso». «Muy probablemente repetiremos elecciones», dice y augura que habrá crecimiento del bloque independentista porque está más movilizado. Cree que Puigdemont quiere cimentar el futuro partido nacional catalán. «Su enemigo no es el Estado, es ERC», constata, y «ahora es consciente de que muchos votantes que podrían irse a la CUP pueden votarle». Es de los que ve a ERC más moderada porque «en ERC hay políticos».

Teresa Freixes, catedrática de Derecho Constitucional en la UAB: «Los grandes partidos no tienen sentido de Estado»

Teresa Freixes insiste en que no se siente española, catalana ni europea, que de sentirse algo, se siente ciudadana de estos tres universos y huérfana de partido político. Cree que fue un error convocar elecciones apenas un par de meses después de disolver el Parlament, porque visto que el viernes se cesaba a dos altos cargos más de la Generalitat, o no ha habido tiempo o «el 155 no ha sido utilizado para desmontar las estructuras que había construido el secesionismo». No se atreve a decir si habrá elecciones, «a los partidos independentistas no les conviene, ahora suman y siempre es un riesgo ir a elecciones». Freixes no confía en la táctica de ERC de ir de moderada para desbloquear la situación actual. «Lean su programa electoral», recomienda. Cree que Roger Torrent, desde el punto de vista técnico, «es el peor president que ha tenido el Parlament de Cataluña jamás». «Su papel es ayudar a formar gobierno, yo lo hubiera retirado», sentencia. Pero también es crítica con el resto de proyectos políticos. «España vive un drama. Los grandes partidos políticos no tienen sentido de Estado, tampoco lo nacionalistas, claro está. Cada uno tiene su modelo y son incapaces de articular uno mínimos comunes que den estabilidad al sistema. Los partidos principales han sido incapaces de pactar unos presupuestos y ahora tienen que acudir a un nacionalista como el PNV. El pecado capital es este, que los partidos no se han tomado en serio al Estado».

Jaume Vives, portavoz de Tabarnia: «Aquí se habla de chantaje y no de diálogo»

Jaume Vives tiene claro cuál es el diagnóstico al actual bloqueo político. Considera que es difícil encontrarle salida porque «aquí no se habla de diálogo, sino se habla únicamente de chantaje» y asegura que la parálisis le conviene a los independentistas porque eso les permite «perpetuarse en el poder». Echando la vista atrás, Vives, también conocido por poner a todo volumen desde el balcón a Manolo Escobar, asegura que el «procés» sólo «ha dejado consecuencias nefastas y ha conseguido la división entre catalanes». Esta confrontación social en Cataluña, para el portavoz de Tabarnia, «es algo grave, máxime cuando durante muchos años se ha intentado homogeneizar a la sociedad». «También es culpa de los medios de comunicación, que venden que todos los catalanes son nacionalistas», añade y asegura que el independentismo ha tenido un «gran aparato de propagando del odio y ridiculazación del disidente». Asimismo, Vives evita inclinarse sobre si se debe acudir nuevamente a las urnas o formar un Govern y afirma que lo preferible es acabar «con la idolatría ciega al líder», en alusión a Puigdemont. «Hay que intentar tener espíritu crítico y ser más amigos de la realidad», agrega. Por ello, para Vives «lo que les toca ahora a políticos nacionalistas es asumir que han engañado al pueblo, algo que ha generado mucha frustración». «Las responsabilidades tienen que ser para los máximos responsables», zanja el portavoz de Tabarnia.