Emergencias
Los centros escolares gallegos permanecerán abiertos en caso de apagón
La Xunta activa nuevos protocolos para garantizar la continuidad de servicios básicos en emergencias como la registrada el 28 de abril
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, anunció este lunes que los centros escolares de Galicia permanecerán abiertos en caso de apagón o emergencia, incluso si no puede desarrollarse actividad lectiva, con el objetivo de facilitar la conciliación familiar. La medida forma parte de un conjunto de protocolos y acciones diseñadas para mantener la operatividad de los servicios esenciales en caso de repetirse situaciones como la interrupción eléctrica vivida el pasado 28 de abril en todo el Estado.
“Queremos ofrecer certezas a las familias”, señaló Rueda, quien recalcó que todo el personal docente y no docente deberá acudir a su puesto de trabajo en su horario habitual, siempre que las condiciones de seguridad lo permitan. El alumnado que acuda a los centros será atendido, aunque no se desarrollarán actividades que impliquen avance curricular ni se realizarán pruebas de evaluación.
Esta decisión se enmarca en un nuevo protocolo específico que la Xunta pondrá en marcha en el ámbito educativo ante situaciones de alerta o emergencia, salvo en los casos meteorológicos, que ya cuentan con normativa propia. El documento establece los niveles y fases de respuesta en el sistema educativo y nace de la experiencia extraída del reciente apagón generalizado.
Autonomía energética y comunicaciones
En paralelo, el Gobierno gallego ha evaluado una batería de medidas transversales para blindar el funcionamiento de los servicios básicos y mejorar la capacidad de respuesta ante apagones. En el ámbito de las emergencias, Rueda destacó la urgencia de que el Gobierno central impulse la redundancia de operadores de telefonía para el CIAE 112-Galicia, de forma que este servicio no dependa de un único proveedor.
Asimismo, volvió a reclamar la integración física de la Policía Nacional y la Guardia Civil en las instalaciones del 112 para mejorar la coordinación en la gestión de emergencias, así como la interconexión de sus sistemas con la red de comunicaciones de emergencias de Galicia, RESGAL. Otra de las demandas al Estado será la recuperación de un grupo estable de la UME en Galicia, con base en la Brilat de Pontevedra.
La Xunta también trabaja en mejorar la autonomía energética de la red de emergencias y de las propias instalaciones del 112, mediante la instalación de conexiones satelitales, matrices Tetra y enlace directo con el 061.
Residencias y centros de discapacidad
En el ámbito social, la Consellería de Política Social e Igualdad impulsará una revisión de los grupos electrógenos de las residencias de mayores y centros de atención a la discapacidad, evaluando su potencia y la capacidad de los depósitos de combustible, con el fin de garantizar el suministro de energía en caso de cortes.
Además, se estudia la creación de un protocolo básico de actuación en las residencias públicas, que determine cómo proceder ante emergencias prolongadas en materia de suministro energético, comunicaciones y apoyo logístico a las personas residentes.
Pacientes vulnerables
Rueda destacó que, pese a las dificultades, la asistencia sanitaria estuvo garantizada durante todo el apagón. Aun así, se reforzarán los sistemas de alimentación ininterrumpida en los centros de procesamiento de datos del Sergas y se obligará a las empresas proveedoras de servicios críticos a contar con vías alternativas de comunicación.
Uno de los pilares del nuevo plan será la protección de los pacientes que dependen de equipos médicos conectados a la red eléctrica en sus domicilios. Para ellos, se activará un protocolo específico que contemple incluso su traslado a centros sanitarios si fuese necesario. Además, se extenderá la dotación de la red Tetra a todos los equipos directivos y técnicos de las áreas sanitarias y se dotará a hospitales y PACs de redes satelitales de órbita baja como respaldo en caso de fallo de las comunicaciones convencionales.
En atención primaria se ampliará el número de generadores y se establecerán mecanismos de suministro seguro de combustible. Los servicios de emergencias sanitarias (061) también verán reforzadas sus comunicaciones mediante centrales públicas autónomas y redes satelitales de despliegue inmediato.
Por último, la Xunta establecerá un protocolo de comunicación y coordinación con empresas esenciales para conocer de forma actualizada la evolución de las incidencias y las previsiones de restablecimiento del suministro. Esta comunicación incluirá a suministradoras de combustible y compañías eléctricas, y se organizará de forma estandarizada y fluida para una respuesta ágil y efectiva.