¿Quién no tiene un Manuel en la familia? ¿Y una Carmen que, por supuesto, es María Carmen en el registro? Si uno pasea por cualquier rincón de Galicia y grita "¡Manuel!", es muy probable que varias cabezas se giren. La tradición sigue pesando, al menos en el Registro Civil. Los datos publicados esta semana por el Instituto Nacional de Estadística (INE) revelan que los gallegos siguen fieles a un puñado de nombres que se repiten como un eco generacional en todas las provincias.

Así, en Galicia viven actualmente 63.512 Manueles y 58.183 María Carmenes, lo que los convierte, una vez más, en los nombres más comunes en la comunidad autónoma. Su liderazgo es indiscutible en las cuatro provincias:

• Manuel se reparte entre A Coruña (25.828), Pontevedra (21.350), Lugo (8.468) y Ourense (7.866).
• María Carmen, por su parte, reina también en A Coruña (26.535), seguida de Pontevedra (19.764), Lugo (6.859) y Ourense (5.025).

Los segundos puestos en el podio nominal tampoco traen sorpresas: José (45.317) y María (35.852) siguen ocupando el corazón de muchos hogares gallegos. A Coruña vuelve a liderar en número de José (17.611) y de Marías (16.866), seguida de cerca por Pontevedra.

El club de los nombres compuestos

El gusto por los nombres compuestos también está muy presente. Especialmente en la variante masculina, con José Manuel, José Antonio y Antonio ocupando puestos destacados. En A Coruña, por ejemplo, José Manuel cuenta con 16.668 apariciones, mientras que Antonio y José Antonio rondan los 11.000 casos cada uno.

Para las mujeres, tras el dúo María Carmen y María, se cuelan nombres como Carmen, María Dolores o María José, especialmente en A Coruña y Pontevedra. Lugo y Ourense muestran variaciones interesantes, con nombres como Josefa y Rosa con una notable presencia.

Rodríguez, Fernández y González

Cuando se trata de apellidos, Galicia también repite con convicción. Rodríguez es el más común de todos, con más de 107.000 personas registradas, seguido de Fernández (más de 100.300) y González (cerca de 80.500).

Sin embargo, la distribución geográfica matiza esta hegemonía. Rodríguez es el número uno sólo en Pontevedra y Ourense, mientras que en Lugo cede el trono a López, y en A Coruña, a García, que es el quinto apellido más habitual en Galicia, aunque primero en esa provincia.

Este retrato estadístico ofrece mucho más que cifras. Es una radiografía que habla de arraigo y de tradiciones. En una época en la que nombres exóticos y combinaciones internacionales están al alza, Galicia se mantiene por ahora fiel a los clásicos.

Y aunque las nuevas generaciones vayan incorporando otros referentes al naming familiar, lo cierto es que en Galicia aún se nace, se vive… y se llama uno como antes. A fin de cuentas, sigue habiendo muchos Manueles y muchas María Carmen que configuran una pequeña identidad que también se escribe en el DNI.