Arrendamientos
Galicia mantiene la calma en el mercado del alquiler
Mientras los precios se disparan en el Mediterráneo, la comunidad gallega cierra el año con un repunte del 2,4%
Los precios de la vivienda en alquiler subieron en Galicia durante el año 2023, aunque a un ritmo más moderado que en el conjunto del Estado. Según el Índice de Precios de Vivienda en Alquiler (IPVA) publicado este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el alquiler se incrementó un 2,4% en la comunidad gallega, dos décimas por debajo del incremento medio nacional, situado en el 2,6%.
Esta evolución convierte a Galicia en una de las comunidades con subidas más contenidas, en un contexto en el que todas las autonomías experimentaron aumentos. En el extremo opuesto se situaron la Comunitat Valenciana (3,6%), Illes Balears (3,2%) e Islas Canarias (2,8%), donde el encarecimiento fue más acusado. Por debajo de Galicia se encuentran Asturias (1,8%), Castilla y León (2%) y Extremadura (2,1%).
El informe del INE revela una tendencia clara: los nuevos contratos son los que más empujan al alza el precio del alquiler. Mientras que los contratos ya existentes antes de 2023 subieron una media del 2,4% -en línea con la media gallega-, los nuevos contratos firmados experimentaron un incremento medio del 4,1% en todo el país.
En cuanto al tipo de edificación, las viviendas colectivas (aquellas situadas en edificios) registraron subidas del 2,7% a nivel nacional, mientras que las viviendas unifamiliares se encarecieron un 2,1%, mostrando un crecimiento más suave.
Galicia, lejos de los grandes repuntes
El IPVA recoge, también, la evolución en las principales capitales de provincia, que concentran buena parte del mercado de alquiler. En este sentido, los mayores incrementos en 2023 se produjeron en Valencia (4,5%), Málaga (3,9%) y Girona (3,5%). Estas ciudades lideran también el crecimiento acumulado desde el año base (2015), con subidas del 28,9%, 26,1% y 23,5%, respectivamente.
El IPVA es una estadística experimental del INE que se elabora a partir de registros administrativos de la Agencia Tributaria (AEAT), con base en los contratos de alquiler que se declaran a efectos fiscales. Su objetivo es reflejar la evolución del precio de la vivienda arrendada como residencia habitual, y se actualiza anualmente desde el año base 2015.
Este índice permite analizar la evolución del precio según la antigüedad del contrato, el tipo de edificación, la comunidad autónoma e incluso por distritos en capitales de provincia.