El postre ideal para la fiestas: Tartaflan de almendra

La víspera de Navidad es un momento especial en el que la comida desempeña un papel crucial en la celebración. Desde los platos principales hasta los aperitivos, un postre delicioso es esencial para completar la experiencia culinaria. Este año, sorprende a tus invitados con una tartaflan de almendra, una combinación única entre tarta y flan que fusiona la textura suave del flan con el rico sabor de las almendras.

Ingredientes:

• 4 huevos grandes
• 250 gramos de almendra molida
• 1 cucharada sopera de harina
• 2 vasos de leche
• 8 cucharadas soperas de azúcar
• Caramelo líquido (puede ser comprado o hecho en casa)

Preparación

1. Comienza separando las claras de tres huevos y reserva las yemas. Asegúrate de que las claras estén a temperatura ambiente para lograr un mejor montaje.

2. Utilizando una batidora eléctrica, monta las claras a punto de nieve hasta que formen picos firmes. Este paso es crucial para otorgar a la tartaflan su textura ligera y esponjosa.

3. Agrega las yemas reservadas y un huevo entero a las claras montadas. Incorpora suavemente la almendra molida, la harina, la leche y el azúcar, mezclando con movimientos envolventes para no perder la esponjosidad.

4. En un molde para tartas, preferiblemente de metal o cristal, vierte una capa generosa de caramelo líquido. Asegúrate de cubrir bien la base y los lados, ya que el caramelo no solo aporta sabor, sino que también facilita el desmolde una vez cocida la tartaflan.

5. Vierte la mezcla en el molde caramelizado y hornea al baño María en un horno precalentado a 180°C durante unos 40 minutos. El baño María garantiza una cocción uniforme y suave, clave para la textura del flan.

6. Para verificar la cocción, introduce la punta de un cuchillo en el centro. Si sale limpia, la tartaflan está lista; de lo contrario, déjala unos minutos más.

7. Deja enfriar la tartaflan a temperatura ambiente y desmóldala con cuidado. Si has aplicado suficiente caramelo y el molde es adecuado, debería desmoldarse fácilmente.

La tartaflan de almendra es un postre que deleitará a todos, desde los más pequeños hasta los más grandes. Su sabor suave y dulce, junto con la textura cremosa y crujiente de las almendras, la convierte en la elección perfecta para cerrar la cena de Nochebuena.

Puedes acompañarla con nata montada, helado de vainilla o incluso frutas frescas como fresas o frambuesas para añadir un toque de frescura. Además, una decoración navideña, como espolvorear un poco de canela o añadir hojas de menta, puede hacer que tu postre no solo sea delicioso sino también festivo.