El “váter refugio” de María Patiño

Bronca monumental en un váter de Telecinco, Lydia Lozano y Mila Ximénez se despedazan verbalmente. En un rincón, escondida debajo del lavabo, una aterrorizadaMaría Patiño huye de la “quema”. Su cara es todo un poema. Solamente falta que lluevan los cuchillos, porque el enfrentamiento sobrepasa los límites.

Patiño parece una estatua de cera, amparada en su improvisado refugio, a menos de dos metros de la taza del váter, no se atreve a pronunciar palabra, se queda muda durante la desagradable escena, más que un baño de señoras parece un campo de batalla.

La pelea dialéctica gira en torno al tema Ylenia Carrisi, la desaparecida hija de Al Bano, a la que Lydia “resucitó” hace quince años. Patiño no toma partido por una de sus dos compañeras, su rostro refleja miedo a lo que pueda ocurrir, menos mal que las “luchadoras” de tan improvisado ring toman caminos separados. Y María se escabulle por los pasillos poniendo distancia con el escándalo.