Ortega Cano vuelve a pedir a su hermana Conchi que no hable más en televisión

El pobreJose Ortega Cano no gana para disgustos, no tiene bastante con las declaraciones públicas de su todavía esposa, Ana María Aldón, que utiliza la ambigüedad cuando se refiere a su vida matrimonial, sino que también se encuentra con que su hermana, Conchi, se une al coro de manifestaciones atacando a su mujer. Y el torero está harto de la actitud de la una y de la otra. Con ninguna le sirve la petición de que guarden silencio y resuelvan sus problemas en familia. Ana va a su aire, volando sola y sin respetar el silencio que implora su marido. Y Conchi un tanto de lo mismo.

Una fuente cercana a Ortega nos desvela que el diestro ha vuelto a ponerse en contacto con su hermana peluquera para que eche mano de la discreción y se deje de desafueros innecesarios.

La situación de su relación con Aldón le trae por el camino de la amargura. La crisis crece cada día y no se han sentado a hablar para buscar soluciones. La frutera diseñadora ya busca casa en Madrid para montar un taller de moda sin que nadie la incordie, porque ahora lo ubica en el sótano del chalet conyugal.

Y veremos si la tan rumoreada ruptura entre ambos se convierte en una realidad en unos días.