Javier Tudela pasa por quirófano y se despide de sus planes para este verano

Aunque muchos estén iniciando sus vacaciones ahora mismo, mientras que otros ya las dan por finalizadas, Javier Tudela ha tenido que poner el freno a su disfrute estival por cuestiones de salud de vital importancia. El hijo de Makoke ha tenido que pasar por quirófano este mismo lunes 31 de julio, para solucionar sus fuertes y constantes dolores en uno de sus pies, que le impiden llevar una vida con normalidad. Un problema que lleva arrastrando demasiado tiempo, pues incluso ya ha dado muestras de él en su última aventura televisiva junto a su madre, en ‘Vaya vacaciones’, grabado con República Dominicana como telón de fondo.

El programa ya ha sido grabado y se sabe quién ha sido el ganador, pero ahora estamos siendo testigos de las consecuencias para Javier Tudela de haber aparcado la solución a sus males médicos, teniendo que confiar ahora en las manos de un cirujano para poder recuperar su vida y dejar los dolores atrás. Y así lo ha contado su novia, la influencer Marina Romero, en sus redes sociales, para informar de la ausencia de su chico en los próximos días y llamar a la calma. Lo hacía mostrando a su chico visiblemente nervioso antes de enfrentarse a la temida operación, aunque también se puede leer en sus facciones que está feliz por no estar solo en estos momentos y ser un paso necesario para estar mejor más pronto que tarde.

El primero en dar muestras de lo que le sucedía ante su horda de seguidores fue el propio Javier Tudela. No quería dejar a sus fans alejados de su rutina, la cual desde hace un tiempo está aderezada con molestos dolores. Se quejaba en su perfil personal de Instagram de molestias en un brazo, en la parte trasera de una de sus rodillas, así como en un pie. Lo contaba después de haberse sometido a las correspondientes pruebas médicas que le ofrecieron un diagnóstico previo: sufre tendinitis en el brazo y en la rodilla, pero nada dijo sobre lo que le sucedía en el pie.

El diagnóstico que recibió el hijo de Makoke sobre su pie no fue tan nimia como las otras. De ahí que se mostrase cauto, aunque sí le quiso poner nombre, asegurando que presentaba un esguince del ligamento colateral cubital y rotura de la banda sagital radial con luxación cubital del tendón extensor del dedo gordo. En resumen, que tenía motivos suficientes para quejarse del dolor y que, además, como él mismo añadió, “no es nada común”, lo que añadía preocupación al asunto.

Un problema que le ha llevado ahora a someterse a una operación, lo que le obligará a frenar el ritmo, aparcar los planes de verano y centrarse exclusivamente en recuperarse si quiere andar con normalidad y continuar con su gran pasión: el deporte. Seguro que seguirá todas las recomendaciones médicas que le han marcado para su recuperación y rehabilitación, pues sobre la mesa tiene una firme amenaza de los profesionales: si esta operación no termina con el cartel de ‘éxito rotundo’, deberá pasar de nuevo por boxes.