La Justicia permite a Mediaset hablar de Daniel Sancho: se desestiman las medidas cautelares

El equipo legal que defiende los intereses de Daniel Sancho frente al juicio en Tailandia por el asesinato de Edwin Arrieta también trata de protegerle en España. Y es que desde sus distintos gabinetes de abogados se ha tratado de frenar la información que se publicaba sobre él en los medios de comunicación, especialmente por parte de Mediaset, donde se veían supuestas transgresiones a su imagen pública, honor e intimidad. Así, Rodolfo Sancho ordenó a sus bufetes a solicitar judicialmente medidas cautelares ante la constante difusión de imágenes de su hijo en la prisión de Koh Samui, entre otras informaciones que le perjudicaban de cara a la celebración del juicio. No obstante, se han rechazado tales medidas contra Mediaset España.

La magistrada del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 56 de Madrid ha resuelto este mismo jueves 21 de diciembre desestimar íntegramente dichas medidas cautelares. La Justicia considera que no se cumplen los requisitos legales necesarios para silenciar a un medio y prohibirle realizar el ejercicio de la libertad de información y expresión. Y es que Rodolfo Sancho, siempre defendiendo los intereses de su hijo en prisión, pedía formalmente que se prohibiese al citado grupo mediático a centrar su interés en ciertas parcelas que consideraba irrelevantes en el caso que le ha hecho dar el salto a la fama, muy a su pesar.

En primer lugar, desde los diferentes equipos de abogados contratados por la familia de Daniel Sancho se solicitaba la prohibición de emitir imágenes suyas previas a la detención. Es decir, ninguna imagen del protagonista captada antes del fatídico 2 de agosto podrían ser emitidas por Mediaset España. Pero tampoco permitían que se publicasen instantáneas del asesino confeso de Edwin Arrieta que fuesen realizadas en el centro penitenciario en el que cumple condena de forma provisional hasta que se celebre el juicio. Con ello, se limitaba sus fotografías a aquellas realizadas por los medios cuando colaboraba con las autoridades tailandesas a esclarecer el caso, así como aquellas filtradas mientras trataba de encubrir sus pasos por la isla por la que diseminó partes del cuerpo del cirujano colombiano.

Además, Daniel Sancho también quería protegerse de los comentarios que se vertían en las tertulias y mesas de actualidad realizadas en los distintos programas de Mediaset España. Se quería establecer un límite en su vida anterior, en la parcela privada y todo aquello referente a su intimidad, aunque esto ayudase al público a realizarse una idea de cómo era la vida del joven chef antes de cometer el crimen. También aquella información referente a cómo era su vínculo con Edwin Arrieta, en el que se desdibujaban los límites de la amistad, una supuesta relación amorosa y también sus lazos empresariales. Finalmente, la Justicia ha entendido que sí se podrán mostrar imágenes previas al asesinato, así como aquellas que se logren filtrar desde el centro penitenciario en el que cumple condena y también comentarios sobre su vida privada, siempre y cuando tengan relación con el caso que le ha colocado en la palestra informativa.