Opinión
El «confía coño» de Irene Montero
En un mundo caótico en el que todos desconfían de todos (yo desconfío mucho de mí mismo), ella se dirige a su concha (en argentino queda más fino) para animarla en la dura guerra que se avecina
Es cosa sabida que todas las grandes frases y gran parte de los grandes personajes acaban en una camiseta, y, para su colmo y desgracia, muchas veces sudada. Para celebrar su despedida de ministra (¿a ningún restaurante se le ha ocurrido añadir las despedidas de ministras y ministros a las bodas, bautizos y comuniones?), Irene Montero lució una camiseta blanca con la leyenda «Confía coño» muy comentada en las redes.
Como no hay coma entre el confía y el coño, podríamos interpretar que el mensaje que Irene nos quiere enviar en estas horas de bajón es muy claro: anima a su coño a que confíe. No aclara en qué debe confiar, si en ella misma, en Pablo Iglesias o en la guerra declarada a la Yoli para que vuelva a su color de pelo natural.
Ejemplar y épica la Montero: en un mundo caótico en el que todos desconfían de todos (yo desconfío mucho de mí mismo), ella se dirige a su concha (en argentino queda más fino) para animarla en la dura guerra que se avecina. No le basta con los gritos que le dedicaron en la mani del pasado 25-N: «Irene Montero, te quiere el mundo entero» y «Hermana, aquí está tu manada».
Dan subidón, pero luego viene el olvido. Dicen las lenguas viperinas que Irene y la Belarra estudian formar un cuarteto protesta con Lilith Verstrynge y Pam para sacarle los colores morados al Gobierno que les dio la patada en el mismísimo.
No, no serán las «Motomami», que a Rosalía le da nostálgica y se lanza por Rocío Jurado, que era feminista, pero como Carmen Calvo. Ellas irán, si van, en plan hard rock de «Metallica». Ninguna se llama Concepción, pero serán «Las Conchas Duras». Y saldrán vestidas para matar, qué coño.
✕
Accede a tu cuenta para comentar