Opinión

El diario de Amilibia: Él casi le canta a Scholz: «A tu vera...»

Algún día los politólogos y los polímatas descubrirán que a Él le gusta discursear fuera de España no solo por volar en el Falcon, sino sobre todo porque por ahí le creen todo

BERLÍN, 09/12/2023.-El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, se reunió hoy en Berlín con el canciller alemán, Olaf Scholz, en la recta final de la presidencia española del Consejo de la Unión Europea que termina el próximo 31 de diciembre. El encuentro se produjo en el centro de congresos donde se celebra este fin de semana la convención anual del Partido Socialdemócrata (SPD) de Scholz, en la que el propio Sánchez intervendrá con un discurso ante los aproximadamente 600 delegados. ...
Pedro Sánchez se reúne en Berlín con el canciller alemán, Olaf ScholzFernando.CalvoAgencia EFE

Para que luego digan que esto, todo esto, no es un circo: la libertad de los presos de ETA la piden hasta unos payasos vascos, Pirritx, Porrotx y Marimotots. Cantan a los niños eso de «presos a la calle», imagino que en vascuence, quizá con una musiquilla parecida a la de los Payasos de la Tele en «Hola, don Pepito, hola, don José» o «La gallina Turuleca», aunque en este particular caso la citada gallina, dicho sea sin ánimo de ofender a la gallina, en vez de huevos pone bombas.

Bildu ensaya con gotas de adoctrinamiento en la papilla de los vasquitos como la vedette Bárbara Rey ponía orfidal en el biberón de sus niños, Sofía y Ángel Cristo Jr.

Él ha puesto gotas de amor incondicional y eterno hacia el canciller socialdemócrata Olaf Scholz en Berlín. Dijo allí: «Querido Olaf, hoy y siempre, aquí y en Bruselas, me tendrás a tu lado. Cuenta conmigo, cuenta con los socialistas españoles para librar todas las batallas y desafíos que nos unen».

Lo más sorprendente es que Olaf, por lo que vi en las fotos, puso cara de habérselo creído y le aplaudió, entusiasta. Al presi español solo le faltó cantarle aquello de «A tu vera/ siempre a la verita tuya/ hasta que por ti me muera», en plan Lola Flores arrebatada.

Para un alemán debe de ser difícil entender que tanto calor y amor pueden quedar en postureo ritual. Eso no está en Goethe, ni en Rainer Maria Rilke, los escritores patrios. Ni siquiera en las salchichas con chucrut.

Algún día los politólogos y los polímatas descubrirán que a Él le gusta discursear fuera de España no solo por volar en el Falcon, sino sobre todo porque por ahí le creen todo, y eso siempre es un subidón de autoestima.

Como algunos niños vascos creen a sus payasos.