Estilo
Felipe González, con chaleco y bastón, todo un dandy victoriano
El expresidente socialista asistió a la ceremonia de entrega del premio Carlos V a Josep Borrell, celebrada en el Monasterio de Yuste
Hubo un tiempo, una década roja, en el que Felipe González partía literalmente la pana. A sus 83 años, luce una imagen más elegante y de hombre refinado, tal y como pudimos apreciar este viernes en Yuste, donde acudió a la entrega del premio Carlos V a Josep Borrell. Con bastón, chaleco y sastrería impecable, la imagen del expresidente socialista parecía casi victoriana. Muy similar a la del político británico Winston Churchill, un hombre muy elegante que también asistía a los eventos oficiales con un bastón, más como pieza de adorno que como apoyo.
Más allá de su utilidad práctica, el bastón ha sido usado históricamente como epítome de poder y sofisticación. Ha servido de símbolo distintivo a aristócratas, reyes, escritores y otras muchas personalidades que deciden soportar sobre él el peso de sus biografías. Hasta David Bowie usó el bastón como parte de su imagen de ícono del rock durante su fase de Ziggy Stardust, ofreciendo un estilo ecléctico y vanguardista. También Charles Chaplin lo popularizó en su personaje en "El vagabundo", aunque, en este caso, con un tono cómico.
Acompañado por su mujer, Mar García Vaquero, Felipe González llegó muy sonriente y con gafas de sol, al Monasterio de Yuste, con motivo de la entrega de la ceremonia de entrega de la XVIII edición del Premio Europeo Carlos V, presidida por Felipe VI, que reconocía a Josep Borrell por su trayectoria política y contribución a la defensa de la paz y los valores europeos. En su fallo, el jurado destacó, además, su gestión durante la pandemia del COVID y el desarrollo de un plan de acción con el fin de reforzar la política de seguridad y defensa hasta 2030 para la Unión Europea.
En el acto estuvieron también presentes Javier Solana, Marcelino Oreja y el expresidente Mariano Rajoy, que consideró "un privilegio intervenir en el acto porque cree firmemente en el proyecto de construcción europea". Recordó en su intervención el camino "de paz y bienestar" que se acordó tras la Segunda Guerra Mundial.
No es la primera vez que el expresidente socialista aparece apoyándose en bastón. En 2018, también tuvo que recurrir a él después de una caída. Aunque no fue grave, por seguridad optó por usar este accesorio para caminar hasta su total recuperación. Igual que ahora, la imagen llamó la atención y despertó algunas alarmas por su salud. Fue un episodio eventual y posteriormente prescindió de él, pero manteniéndolo ya como parte imprescindible de su fondo de armario.