España

Madrid ya tiene novillero

- Las Ventas (Madrid). Quinta de la Feria de San Isidro. Se lidiaron novillos de Buenavista y de Fernando Peña (4º y 6º). El 1º, como sobrero, de Couto de Fornilhos, muy desiguales de presentación y hechuras. Violento pero con faena el 1º; malo el 2º; mansurrón y media arrancada el 3º; brusco y a peor el 4º; con movilidad y descuelga el 5º; parado, aquerenciado y deslucido el 6º. Tres cuartos de entrada.- Conchi Ríos, de turquesa y oro, estocada defectuosa, aviso, dos descabellos (pitos); dos pinchazos (silencio).- Tulio Salguero, de verde hoja y oro, pinchazo, bajonazo, descabello (silencio); pinchazo, estocada, aviso (silencio).- Gonzalo Caballero, de blanco y plata, buena estocada (oreja); estocada desprendida (silencio).

Madrid ya tiene novillero
Madrid ya tiene novillerolarazon

La tarde iba mal. O peor. Dos hierros anunciados y tres acabaron por saltar al ruedo. Cada novillo más distinto, unos por juveniles y otros por inmensos. Gonzalo Caballero acabó con el cachondeo en diez minutos. Hubo un antes y un después a lo que hizo el madrileño en su plaza. Molestó el viento una barbaridad, vendaval por momentos, cuando llegó su turno nos olvidamos, se olvidó. Lo superó o las rachas fueron a menos. No lo sé, pero Gonzalo Caballero, quédense con el nombre, puso las cosas en su sitio. Un monumento al valor, la ambición y el aplomo para estar en la plaza. Cuando se afronta por derecho el compromiso de Madrid, Las Ventas claudica. Ayer nos conquistó a todos. Y ya lo hizo en la primera tanda. En el tercio, por estatuarios de esos convencidos, de aquí no me mueve nadie, y ni un centímetro cedió al utrero. Aunque lo mejor fluyó en los cambios de mano que encadenó antes de poner fin al prólogo de faena. A esas alturas, no podíamos mirar a otro lado. El animal, de Buenavista era mansito, iba despacio al engaño con media arrancada, acostándose pero sin excesivo empuje. Daba igual, se le podía poner todas las complicaciones que el compromiso de Caballero se intuía hasta en las puertas de Vistalegre. Se rajó el toro, tan pronto, en toriles buscaba un cobijo que acabó por encontrar en la muleta del novillero. Firme. Asentado, no, atornillado a la arena de Madrid. Y ahí ya sí ligó las medias arrancadas del toro, puso la muleta, y mucho antes el corazón. Le pasó muy cerca muchas veces pero a su aplomo no le hacían mella las cercanías. En tablas, en la distancia corta le pegó una de las manoletinas desafiante: a los terrenos, a la distancia... A todo. Se tiró a matar de verdad. El pecho por delante, encuentro rápido y veloz y buena estocada. El trofeo valía su peso en oro. Y además de tener la puerta de la gloria a medio abrir, había conquistado a la afición. Madrid tiene cantera en este novillero. Se esperaba el sexto para convertir el encuentro en apoteósico triunfo, pero el novillo manseó y se paró. Imposible.

Puso en un abismo las comparaciones. A Conchi Ríos le tocó el mejor novillo, el primero, punto violento pero con faena. No estuvo a la altura. Con el grandón cuarto se tapó. Poco quería saber el novillo, más de lo mismo la novillera.

Tulio Salguero fraguó una faena tan firme como anodina al quinto, que se movió algo más y descolgó y pasó lo suyo con el segundo, que tuvo claro peligro. Quiso estar.
Gonzalo Caballero nos situó a todos. Qué buen camino el suyo.


Cayetano: objetivo Las ventas
El diestro Cayetano Rivera recibió ayer el alta hospitalaria en la Clínica Los Álamos en la que permanecía ingresado desde el sábado y continuará su recuperación en la capital de España bajo la supervisión de Máximo García Padrós, cirujano jefe del coso venteño. Precisamente, Madrid es ahora el gran objetivo que aparece en la mente del torero, ya que está anunciado el próximo 23 de mayo.