El Barcelona encuentra la paz

Caras muy distintas las que se vieron ayer sobre el césped de la ciudad deportiva «Joan Gamper» a las del pasado domingo, cuando los jugadores del Barcelona saltaron a entrenarse apenas doce horas después de caer derrotados de manera sorprendente ante el Hércules en el Camp Nou. Los azulgrana estaban ayer de lo más sonrientes y haciendo una broma tras otra entre ellos. Queda claro que la goleada y la buena imagen ofrecida ante el Panathinaikos, en el estreno de la Liga de Campeones, han actuado como el más perfecto de los bálsamos.

Guardiola dirigió una suave sesión de recuperación después del desgaste que supuso el choque ante los griegos. Los titulares se ejercitaron al margen, centrando el trabajo en el aspecto físico de una manera bastante más intensa que en otras ocasiones. En este pequeño grupo sólo hubo tres ausencias. Pedro, que acudió al dentista para que le extrajeran una muela; Piqué, que lo hizo en el gimnasio por precaución ante la herida que tiene en la cabeza; e Iniesta, que trabajó al margen, ya que sigue un plan específico de preparación para cuidar al máximo sus músculos.

El resto de la plantilla siguió con su entrenamiento normal, incluido Jeffren, que lo hizo durante un rato por primera vez desde que cayera lesionado. También se unieron tres hombres del filial azulgrana: Thiago, Rochina y Riverola. Luego, Guardiola decidió concederles un día de fiesta, así que hasta mañana no comenzarán a preparar el asalto al Vicente Calderón, donde el domingo se enfrentarán al Atlético de Madrid a partir de las siete de la tarde.

Las pocas dudas que habían surgido en el entorno barcelonista tras el resultado negativo cosechado ante el Hércules quedaron disipadas por completo el martes. Pero, según Busquets, nada de eso había trascendido dentro del vestuario. «Si han existido dudas, ha sido de puertas hacia afuera. Nosotros no las hemos tenido nunca, a pesar de que el sábado tuvimos un mal día», explicó ayer.

El centrocampista azulgrana recuperó la titularidad ante el Panathinaikos y el Barça notó en positivo su presencia. Pero al de Badia le gusta mantenerse al margen y ser autocrítico: «Aún debo mejorar el desplazamiento en largo y el chute a media distacia».

«Busi» afrontará el domingo un bonito reto, ganar en uno de los pocos campos de Primera en los que no lo ha conseguido, el Calderón. «Las estadísticas están para romperlas, y eso intentaremos este domingo. Hemos de preparar el partido muy bien y jugar con nuestras armas», afirmó. Por último, elogió a su compañero Leo Messi: «Está por encima de todo y de todos. El segundo está a mucha distancia».


Messi se acerca a Rivaldo como «pichichi» internacional azulgrana
Con los dos goles que logró ante el Panathinaikos, el segundo digno de museo, Leo Messi se convirtió en el máximo goleador del Barcelona en la Copa de Europa. El argentino superó a Rivaldo, con el que estaba empatado a 25 dianas, y ahora ya atesora 27, aunque da la sensación de que serán muchas más con el paso del tiempo. Pero el brasileño sigue ostentando el honor de ser el máximo goleador azulgrana en competiciones internacionales, aunque no tiene pinta de que le vaya a durar mucho. Rivaldo marcó 31 goles internacionales vistiendo de azulgrana. Messi acumula 29, los 27 en «Champions» más los dos que logró en el pasado Mundial de Clubes disputado en Abu Dhabi. La «Pulga» también persigue igualar a Van Nistelrooy como único jugador que ha sido «Pichichi» de la «Champions» en tres ocasiones. Messi ya lo ha sido dos veces y aspira este año a la tercera.