Ibex 35

La Fed lanza otro plan a la desesperada

Canjea 294.000 millones de deuda a corto plazo por la misma cifra a largo

El presidente de la Reserva Federal (Fed), Ben Bernanke
El presidente de la Reserva Federal (Fed), Ben Bernankelarazon

EE UU mira al pasado para salvar el futuro. La Reserva Federal (Fed) anunció ayer que iniciará un canje de bonos del Tesoro a corto plazo por otros de más largo plazo por un monto de 400.000 millones de dólares, unos 294.000 millones de euros. El programa, que los economistas llaman «twist» y que se usó en los años 60, proporciona estabilidad y empuja a la baja los tipos de interés al retirar esa deuda del mercado.

 

Hasta finales de junio de 2012 procederá a la compra de bonos de seis a 30 años por la citada cantidad, a la vez que venderá deuda por esta misma cantidad en obligaciones a 3 y menos años. La decisión no contó con el consenso de todo el consejo de la Fed, ya que tres de sus miembros votaron en contra de la medida. El banco central también mantuvo los tipos de interés entre el 0% y el 0,25%.

 

Wall Street se desploma

 

Tras conocer la operación del organismo que preside Ben Bernanke, el principal indicador bursátil de Wall Street, el Dow Jones de Industriales, registró un desplome del 2,49%. La operación fue anunciada el mismo día que el FMI advirtió de que la crisis de deuda europea puede desembocar en otra recesión. «El tiempo se agota», advirtió ayer José Viñals, director de Asuntos Monetarios y Mercados de Capitales del Fondo Monetario Internacional (FMI). O Europa ataja el problema, o su banca puede sufrir un colapso similar al que derribó a Lehman Brothers en 2008.

 

Viñals, durante la presentación del informe «Estabilidad Financiera Global», fue muy claro. Subrayó que es «de vital importancia garantizar que estas medidas se pongan en práctica sin demora». El temor del FMI es que, de no hacerlo, y dada la alta exposición de algunas entidades a la deuda periférica, estos bancos puedan verse forzados a cortar el crédito. Para contener el riesgo, el FMI solicitó que se inyecte capital a las entidades que lo necesiten y que se reestructuren o liquiden las débiles.

 

Los datos del organismo no precisan la cantidad exacta de capitalización requerida y se limitan a afirmar que las pérdidas provocadas por las tensiones en torno al crédito soberano de los países periféricos han sido de unos 200.000 millones de euros para los bancos de la UE desde 2010. De esta cantidad, cerca de 60.000 millones serían consecuencia de los problemas de de Grecia. El BCE anunció ayer que una única entidad de la eurozona, probablemente, recibió 500 millones de dólares en la última subasta.