Distribución

El 90 por ciento del comercio valenciano no subirá el IVA

La presidenta de los comerciantes valencianos denuncia que los gastos corrientes sí aumentarán un dos por ciento.

El 90 por ciento del comercio valenciano no subirá el IVA
El 90 por ciento del comercio valenciano no subirá el IVAlarazon

No están las cosas como para ir subiendo el precio de la cesta de la compra. Si el consumidor, de por sí, ya está bastante desconfiado y reticente a la hora de gastar, un aumento del coste es lo menos adecuado. Por ello, el 90 por ciento de los comercios valencianos no repercutirán en el precio el aumento del IVA de un dos por ciento que entró en vigor el pasado 1 de julio.Según explicó ayer la presidenta de la Confederación de Empresarios del Comercio Valenciano (Cecoval), Isabel Cosme, por ahora no se ha notado este aumento debido al efecto de las rebajas. «Habrá que esperar al próximo mes de septiembre», dice, momento en el que la mayoría de los comerciantes asumirán la subida del IVA para no perder clientela. Sólo aquellos que no cuenten ya con margen de maniobra se verán obligados a reflejar el aumento en el precio de sus productos, con la correspondiente pérdida de competitividad que esto implica.Cosme denuncia que, a pesar de que no se producirá un incremento de los beneficios por la subida del IVA, sí habrá un crecimiento del gasto corriente para los comercios (luz, agua, precio de los materiales), con lo cual se verán muy perjudicados. Además, el consumidor será un dos por ciento más pobre, sobre todo a partir de septiembre, cuando ya hayan finalizado totalmente las rebajas y se inicie la campaña normal.La presidenta de los comerciantes recordó que su colectivo se mostró «totalmente en contra» de esta medida del Gobierno central desde un principio, aunque por ahora no se hayan sentido todavía los efectos negativos.En cuanto al funcionamiento de la actual campaña de rebajas, Cosme explicó que, en moda y complementos, empezó muy fuerte porque hay mucho consumo retenido que está esperando el momento en que bajen los precios para comprar y sigue habiendo un poco de consumo «compulsivo». Pero en otros productos más perecederos se trata sólo de consumo retenido.