Argentina

Repsol rompe la cultura presencial

La multinacional española impulsa el teletrabajo y cierra el año con 600 personas adheridas a un proyecto que está logrando mejorar los resultados con la conciliación laboral y familiar

Repsol valora que el teletrabajo conlleva un aumento de la motivación y de la autonomía
Repsol valora que el teletrabajo conlleva un aumento de la motivación y de la autonomíalarazon

MADRID- Cambia el concepto «face-time» por el de «no presencia». Rompe la idea de que la presencia física debe anteponerse a los resultados y evalúa lo importante, según Repsol, que es la consecución de metas de la empresa. Éste es el cambio de cultura de trabajo por el que apuesta la compañía. No se cuestiona la causa por la que se solicita la adhesión al programa, la clave es flexibilidad y el método, teletrabajo. La base, la efectividad y la motivación se disparan cuando se logra conciliar la vida personal y la profesional.

Opciones de teletrabajo que incluyen desde trabajar un día por semana hasta tres. También es posible aplicarlo un 20% del tiempo diario o un par de tardes a la semana. Sólo se cierran en agenda reuniones entre el jefe y el colaborador y se firman 16 horas semanales en el centro para que el trabajador no se desvincule. El resultado es, apunta Repsol, que aumenta el rendimiento de los empleados.

El proyecto nace en 2006, cuando la compañía realiza un Estudio de Clima Laboral entre sus empleados y diagnostica una necesidad de fomentar medidas de conciliación. Comienza un programa piloto en 2008, con la participación de 91 personas de cinco áreas de las oficinas de Madrid. Un año después extiende el proyecto a siete áreas más y la incorporación de trabajadores asciende a 362 personas. Se desprendió así de los datos que el promedio de teletrabajadores por género ascendió al 34% en el caso de los hombres y al 66% en el caso de las mujeres. Por tramos de edad, se registraron más inscripciones por parte del personal cuya edad estaba comprendida entre los 35 y 39, así como entre los 40 y 44 años, según datos de 2009 que ha ofrecido Repsol.

La investigación reveló además encuestas de satisfacción, de jefes y empleados, que ha desembocado en una apuesta por continuar con la línea emprendida y la previsión es que este año se cierre con más de 600 personas adheridas al proyecto. De hecho, el programa se ha abierto a todos los trabajadores de Madrid, han empezado a desarrollarse pilotos en áreas industriales y otras oficinas de España y también se ha iniciado en centros de Portugal y Argentina. Y es que el empleado conserva todos sus derechos y beneficios sociales, la participación es voluntaria y se abre a todos los colectivos y categorías profesionales. Existen, eso sí, ciertos requisitos básicos: tener una función teletrabajable, que no requiera presencia física o cobertura de un horario específico ni esté relacionada con el centro físico de trabajo; es imprescindible tener dos años de antigüedad dentro de la compañía, así como uno de experiencia en el puesto; que se apruebe por un superior y se estime un desempeño adecuado. Repsol posibilita que se pueda acceder a redes corporativas, aplicaciones de la compañía y a toda la información necesaria, en cualquier momento, en cualquier lugar.


Los beneficios del teletrabajo: rendimiento y motivación
- Los empleados que participan en el programa de teletrabajo de Repsol afirman que, además de proporcionarles mayor conciliación laboral con su vida personal, esta medida les permite ahorrar tiempo, además de mejorar su efectividad e incrementar su motivación. Asimismo, quienes tienen a cargo a personas que han optado por trabajar desde casa señalan que elementos imprescindibles como el rendimiento y la actitud de sus empleados han mejorado. Destacan que reduce el estrés y mejora la disposición, sin impactar negativamente en el resto del equipo.

- Según la investigación que ha acompañado todo el proceso de desarrollo del proyecto, los beneficios son evidentes para la compañía y para sus empleados. Según ha informado Repsol, se ha potenciado el compromiso de los trabajadores, ha facilitado el equilibrio y se ha notado un aumento de la autonomía y de la mejora del clima laboral. El objetivo es ahora que la iniciativa de España se convierta en un programa de carácter mundial. Se está elaborando además un Libro Blanco para documentar y difundir el proceso. Para Repsol, la idea es que su experiencia pueda servir a otras compañías.