Génova

El PSOE se apropia del discurso del Rey y el PP se une a la llamada de unidad

Los socialistas creen que las palabras del Monarca avalan su política de reformas

Acaba el discurso de Su Majestad el Rey y los partidos buscan el párrafo, la palabra, la idea que apuntale su discurso particular. Da igual que Don Juan Carlos haga llamamientos a la unidad como hizo en Nochebuena, a mirar más allá de intereses particulares, a procurar juntos un futuro mejor para todos los españoles. El día después de la tradicional alocución de Nochebuena, cada uno barre para casa, aunque ayer, la lectura de las palabras del Monarca suscitaba más afanes en la sede de Ferraz, con un PSOE en caída libre, que en Génova, donde el Partido Popular vive en la inercia de unas encuestas cada vez más halagüeñas y de una situación política dulce.
Así, los socialistas vieron en el discurso del Rey un respaldo a sus políticas y a sus reformas económicas en primer lugar. En segundo término, alababan la llamada a la unidad para salir de la crisis que impregnó toda la alocución del Monarca. La secretaria de Política Internacional y Cooperación del PSOE, Elena Valenciano, fue la encargada de analizar ayer el discurso del Jefe del Estado. Y en su reflexión se refería al Rey como «mensajero del aliento y de la confianza en el futuro de España», mientras valoraba positivamente que Don Juan Carlos se mostraba «defensor del rumbo de España y de las reformas que estamos acometiendo».
En el lado contrario, el vicesecretario de Comunicación de Partido Popular, Esteban González Pons, valoró especialmente la llamada constante del Rey a la unidad de acción frente a la crisis económica. En concreto, el dirigente popular aseguró que su partido «se apunta» a la propuesta de «unidad y reformas». En esta línea, añadió, la unidad «debe ser la del codo con codo, no la unidad de la comparsa».
Recado al PSOE
Respecto a las reformas, indicó que tienen que responder a «un plan meditado, pensado, con fuerza para triunfar», así como a «un plan pactado, negociado y conocido por todos».
En su opinión, el Monarca «demostró que conoce lo que pasa en la calle», es decir, que es «un Rey pegado al terreno». En este sentido, recordó que «dedicó la mayor parte de su discurso a aquellas personas que no tienen empleo, a los parados, a los que peor lo están pasando».
Más allá de los dos principales partidos políticos, el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, uno de los más buscados en Madrid tras la victoria de su coalición en Cataluña, quiso aportar su propio análisis del discurso real. Así, subrayó que comparte con Don Juan Carlos la necesidad de acometer reformas estructurales en la economía para salir de la crisis y recordó, en este sentido, que el Gobierno «siempre va tarde y no las toma en su justa medida».
El portavoz de la formación nacionalista se sumó a la petición del Monarca a favor de la unidad de los partidos políticos para luchar contra la crisis y volvió a pedir la consecución de un pacto de Estado que, aseguró, «no ha sido factible por culpa del Gobierno y el Partido Popular». El tercer aspecto que destacó el líder democristiano del discurso del Rey fue su referencia a los valores, y coincidió con Don Juan Carlos en que «tras la crisis económica hay una crisis de valores». Por eso, apeló a retomar los valores del esfuerzo, el ahorro, el trabajo bien hecho y el ser antes que el tener.
Otro partido catalán, Esquerra Republicana, se limitó a través de su secretario general, Joan Ridao, a valorar que es muy difícil la unidad que ha pedido el Rey para luchar contra la crisis económica mientras esté gobernando José Luis Rodríguez Zapatero. «Es difícil –insistió– la salida unitaria contra la crisis cuando hay un Gobierno como el de Zapatero que primero negó la crisis, luego la minimizó y al final actúa al dictado de los mercados y haciendo un seguidismo de un directorio europeo claramente neoliberal».


Audiencia a la presidenta del Parlament
- Horas antes de la emisión del tradicional discurso de Nochebuena, Su Majestad el Rey recibió en el Palacio de la Zarzuela a la presidenta del Parlamento autonómico catalán, Nuria de Gispert. La audiencia, un trámite formal cada vez que se celebran elecciones, sirvió para que la nueva presidenta de la Cámara catalana informara a Don Juan Carlos de que Artur Mas será investido presidente de la Generalitat de Cataluña por decisión de los diputados autonómicos. En el transcurso del encuentro, que duró poco más de media hora, según la presidenta, el Rey se mostró «muy agradable y simpático», y le transmitió sus felicitaciones para Mas. Además, Don Juan Carlos expresó a De Gispert su interés por la situación económica de Cataluña. La presidenta del Parlament entregó al Monarca la resolución de la Cámara catalana sobre la investidura, que se aprobó en el pleno del jueves. Corresponde al Rey hacer el nombramiento de Mas como nuevo presidente de la Generalitat mediante un real decreto, que también tendrá que firmar el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
- La agenda pública de la Familia Real, que estos días conjuga descanso con trabajo de despacho, se limita al viaje que Su Alteza Real el Príncipe de Asturias realizará el 1 de enero a Brasil para asistir a la toma de posesión de Dilma Rousseff como nueva presidenta de la república suramericana.