Cuidado que muerden

Costó 24 millones de dólares y ya lleva recaudados en Estados Unidos más de ochenta. La crítica ha cerrado filas y celebrado la nueva cinta de Alexander Aja («Las colinas tienen ojos», «Reflejos»), a quien en Hollywood han bautizado como Mr. Remake (a él le hace gracia), que mezcla terror y comedia en una coctelera en la que caben guiños a «Piraña», un clásico del género dirigido por Joe Dante en 1978. «Mi idea era regresar al espíritu de los 80, a esas cintas que nos producían un placer inconfesable porque daban miedo, pero que a la vez resultaban divertidas y alegraban la vista con un montón de chicas estupendas con minúsculos y chillones bikinis y que generalmente eran rubias», comenta el director, quien apostilla que se decidió por utilizar las tres dimensiones porque «del cine que se sale de la pantalla no te puedes escapar».

Guiño a «Tiburón»
La cinta de Dante se estrenó hace 33 años y Aja no ha querido hacer un «remake», aunque no puede evitar –y así lo confiesa– sentir ciertas debilidades. Por su cabeza rondaba contar con Richard Dreyfuss, protagonista de otro título en la memoria colectiva, «Tiburón» (estrenada en 1975): «Quería repescar el personaje de Matt Hopper tal y como aparecía en la cinta de Spielberg nada más empezar la película, con una caña, aunque le dura poco porque lo devora un ejército de pirañas prehistóricas». Lo consiguió, le vistió con la misma ropa e incluso lucía las gafas de hace 36 años y cantaba «Show me the way to go home». «Es como si un personaje saliera de un filme para meterse en otro», dice. Bob Wenstein, el poderoso productor de Hollywood, fue clave en el proyecto «porque me animó y me dijo que iba en la dirección correcta: hacer un filme de miedo con referentes de la cultura popular. Pudimos contar con Christopher Lloyd, el científico loco de ‘‘Regreso al futuro''. Me sentía como de vuelta a mi adolescencia», y recuerda el cine de palomitas de los 70 y 80 y de terror «con animales como ‘‘Alien'' (1979), de Ridley Scott, y ‘‘Gremlins'' (1989), así como aquel «con abundancia de chicas voluptuosas. La escena de la masacre en plena fiesta universitaria es impresionante: de la juerga y la alegría con jóvenes despreocupados que beben y se divierten se pasa al pavor y a los borbotones de sangre». El lago Hevasu (primer nombre que se barajó para la producción) se tiñó literalmente de rojo carmín, «pero era sangre orgánica, que alimenta a los peces», explica Aja para que no haya dudas.

Junto a los rescates de Dreyfuss y Lloyd, el reparto cuenta con la versátil Elizabeth Sue, Kelly Brook, Eli Roth y Steven R. McQueen, efectivamente, nieto del actor.

El detalle
ALTA TEMPERATURA
El sexo siempre ha estado presente, de una u otra manera, en las cintas de terror con animales, quizá por el público «teenager» al que van destinadas. Los animalitos omnívoros de «Piraña» (1978) eran liberados por accidente y acaban en un lago devorando excursionistas. En «Piraña 3D», los peces se meriendan a universitarios en plena juerga etílica. En ambos casos lucen tipo las jovencitas en bikini y las altas temperaturas se combaten con una buena ducha.