CEOE

Una carrera sin caballo ganador

El pistoletazo de salida de la carrera sucesoria en la CEOE lo dio el propio Gerardo Díaz Ferrán el pasado 19 de octubre. En esa jornada, anunció al comité ejecutivo primero y a la junta directiva de la patronal dos horas después su decisión de anticipar dos años las elecciones a la presidencia de los empresarios

Joan Rosell, Santiago Herrero y Jesús Banegas
Joan Rosell, Santiago Herrero y Jesús Banegaslarazon

En tan sólo unos días, la lista de candidatos a disputarse el cargo ha quedado, por el momento, prácticamente cerrada.

Un catalán, un andaluz y un murciano se disputarán los favores de sus compañeros de la CEOE el próximo 21 de diciembre. La gran incógnita a despejar ahora es conocer quién de los tres se convertirá en el nuevo presidente de la patronal o si, por el contrario, ninguno conseguirá superar este reto y, al final, se impondrá una candidatura alternativa y transitoria de consenso.

Eterno aspirante

Joan Rosell, el eterno aspirante al cargo, cuenta con el respaldo del empresariado catalán y vasco. Sin embargo, en su debe pesa, sobremanera, el recelo reinante en la CEOE hacia cualquier soplo nacionalista que entre en Diego de León 50, cuartel general de los empresarios en Madrid.

Históricamente, la CEOE ha defendido la unidad de mercado de España para que todos sus afiliados puedan competir en igualdad de oportunidades. De paso, mantiene su poder intacto, sin cederlo a las patronales territoriales. Por eso, las posibilidades de Rosell disminuyen al calor de la nueva etapa de resurgir del nacionalismo, en esta ocasión el vasco, que vive España en estos momentos, después del acuerdo sellado entre el Gobierno de Zapatero y el PNV. Así, al menos, lo piensan destacados dirigentes empresariales.

Detrás del presidente de la CEA, Santiago Herrero, se encuentra como una piña el empresariado andaluz. Por si fuera poco, la Junta de Andalucía respaldaría «encantada» su candidatura. Precisamente, el apoyo del Ejecutivo de Griñán puede convertirse en un lastre más que en un activo a la hora de acceder a la «conservadora» presidencia de la patronal.

Jesús Banegas, presidente de Ametic, se convirtió este viernes en el tercer y último aspirante, de momento, con la proclamación de su candidatura. En su haber figura el apoyo de más de 5.000 empresas. Su discurso, más centralista, sintoniza con mayor facilidad con el tejido industrial español. En su debe, sin embargo, figura no ser capaz de transformar su candidatura en una de consenso.

En este escenario no sería de extrañar, según puntualizan fuentes de la patronal, que antes del próximo 14 de diciembre, jornada en la que concluye el plazo de presentación de candidaturas, surja una cuarta, capaz de aunar voluntades. «Ésta sería la mejor opción para superar la incertidumbre actual que atraviesa la CEOE», después de la herencia de Díaz Ferrán, asegura a este diario un destacado dirigente de la organización. «Ese nuevo presidente ostentaría el cargo de manera transitoria hasta que llegaran tiempos mejores». Mientras surge o no esta cuarta candidatura, tres hombres se disputan un único destino: la Presidencia de la CEOE.