Nueva York

El día más sangriento en Siria

Los rebeldes sirios denuncian que el miércoles murieron más de 300 personas

El día más sangriento en Siria
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BEIRUT- Que el conflicto sirio haya centrado los debates en la Asamblea General de la ONU no ha servido para nada. La del miércoles se convirtió en la jornada más sangrienta desde el inicio de la guerra en Siria con más de 300 muertos. Mientras los líderes mundiales reunidos en Nueva York discuten sobre qué hacer para poder detener la violencia en Siria, y se espera que en el Consejo de Seguridad de la ONU se vote una nueva resolución contra Damasco –que seguramente será vetada por Rusia y China, dos de los mayores aliados de Siria–, las tropas del presidente Bachar al Asad arrasan con sus tanques y aviones MIG-21 las poblaciones rebeldes. La mayor masacre cometida por el régimen, según activistas, fue en la localidad de al-Dhiyabia (al sureste de Damasco), donde murieron 107 personas, muchas de ellas a sangre fría. En 18 meses de conflicto, la suma asciende a 30.000 muertos.

Con una solución al conflicto cada día más lejana y con el incremento de la violencia diaria, miles de civiles se han visto obligados a abandonar el país para refugiarse en los países vecinos. La cifra de refugiados sirios es ya de 300.000 y podría llegar a 700.000 a finales de año si no se frena la violencia, según pronosticó ayer el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur).

Según la agencia humanitaria de la ONU, para atender las necesidades de estos refugiados se necesitarán unos 487,9 millones de dólares. Pero también hay que tener en cuenta a la población afectada dentro de Siria, que se calcula que asciende a los dos millones, y carecen de productos de primera necesidad.

La comisaria europea de Ayuda Humanitaria, Kristalina Georgieva, reclamó un acceso más expedito para las agencias y organizaciones humanitarias en Siria, donde la situación se agrava al acercarse el invierno.

Ayer, varios bastiones rebeldes asediados por el Ejército sirio en las provincias de Homs, Hama, Alepo, Idlib, Latakia y Deir Ezor fueron objetivo de violentos bombardeos con artillería pesada. Más de medio centenar de personas murieron en los bombardeos, según los Comités Locales de Coordinación.