Sorprende, choca y hasta encorajina la continua negativa con la que responden tanto Marina Danko como Palomo Linares ante su actualidad amorosa de pasión en la tercera edad. Lo cierto es que nunca hay que perder las esperanzas. La todavía guapa colombiana apenas dejó que le retocase los brillos el maquillador contratado para ponerla a punto durante su primera comparecencia pública como imagen de un producto adelgazante, por la que ha sido «tan bien pagá» como Pastora Vega. Las dos encabezan el palmarés de las mejores retribuidas por la firma experta en conseguir a lo último del famoseo para exponerlas ante el paredón interrogador, a la vez que promocionan los productos. Ninguna se les resiste, y lo mismo contratan a Marta Sánchez para ser la imagen de unos champús, que al clan de Jesulín –mamá Bazán, Jesulina y la Campanario– y para sacar así partido de sus vergüenzas.

Multimillonaria
Encomiable y digna de todos los respetos hasta este momento es la conducta de Palomo Linares, que hace revoleras al comentar su divorcio y todavía no acaba de confesar lo que siente por la multimillonaria Lilia López, una señora de sombrerazo que en estos días está inmersa en la preparación de la boda de uno de sus hijos ,que se celebrará en Madrid. Si todo continúa según lo previsto, el enlace tendrá lugar en junio, igual que el de Guti y Romina Belluscio.

La miss tucumana, que pisó España con tan buen pie y ahora acompaña a Susanna Griso en «Espejo público», ocupará un sitio VIP en la primera fila del inminente desfile barcelonés de Rosa Clará, con el que inaugurará «Gaudí Novias». Por su parte, Pronovias se reserva la clausura. Y si la encargada de abrir el día 8 organizará una cena en la Bolsa gótica –el año pasado lo hizo en los bajos del Museo Picasso, que fue descubierto para celebrar cócteles–, el 11, Alberto Palatchi apostará, una vez más, por el majestuoso Palacio Nacional. Se produce así un nuevo enfrentamiento que va más allá de lo que concierne a lo estrictamente profesional. Siempre compiten no sólo con sus diseños –Manuel Motta anda a la baja como diseñador de un Palatchi con el que mantiene varios pleitos que superan lo artístico y lo creativo–, sino también a la hora de fichar a diferentes «celebrities» con la finalidad de que que animen con su presencia a pie de pasarela. Sinceramente, resulta una competencia estimulante.

Adulterado
Aunque este tiempo pasado por agua no induce al «dolce far niente» estival, todos preparan ya la temporada playera, y mayo, como el mes de las bodas, también supone un buen augurio y pregón estival, porque andamos de cumpleaños. Se cumplen 40 de la pasarela ibicenca Adlib, una importante celebración, que no queda atrás y por fin convocan su emblemática muestra para finales de este mes. Ese fue el objetivo cuando nació aunque luego fue adulterado. Lo de Adlib tiene que ser un reclamo, un anticipo y un toque de atención sobre la Ibiza que cada estío se pone a tope. Esto no ocurriría acaso por desidia o despreocupación de la organización, mientras que pasaba lo contrario en los tiempos gloriosos de esa princesa Smilia tan bien evocada por Josep Sandoval en su libro sobre el famoseo en el que cuenta que le ataba a Roman Polanski en sus tiempos isleños, que ahora parecen olvidados. ¡Con lo que supuso para Ibiza ese tándem junto Ursula Andress! Fueron tiempos mejores que ahora intentan recuperar situando esta cita con la moda a finales de mes. Supone una apertura de temporada, una llamada de atención y un pregón anticipador de lo que llegará en días calurosos y animados. Ibiza se mantiene como un hito de destino de veraneo y todo promete ser um buen revulsivo contra la crisis.