Rajoy no hablará de Bárcenas hasta ver si es imputado en el «caso Gürtel»

Madrid- De aquí a las elecciones europeas quedan casi dos meses, largo tiempo en política, aunque las cosas pinten bien para un partido. En el zapato del PP hoy sólo hay una china que puede convertirse, o no, en piedra algo molesta: el «caso Gürtel». Quizás por ello las preguntas al respecto fueron las más incómodas para el líder popular en la comparecencia con la que dio ayer el pistoletazo de salida a la «pelea» por la cita con las urnas de junio. Él está en poder de más información que nadie dentro de su partido, o así debería serlo por las conversaciones que ha mantenido con los dirigentes puestos en la picota por los autos del juez Baltasar Garzón. Con ellos ha hablado para tantear de primera mano qué hay detrás de las acusaciones del magistrado de la Audiencia Nacional. Ayer se le preguntó por el futuro del tesorero nacional, Luis Bárcenas, y por el del europarlamentario Gerardo Galeote, hombre del «aparato» del PP y todo un poder fáctico en Bruselas, por los años de experiencia en sus responsabilidades europeas. Rajoy no moverá ficha hasta que no haya un tribunal, distinto de Garzón, que decrete la imputación de uno u otro. En el PP hay quienes ven cada vez más cercana la posibilidad de que la causa pase al Tribunal Supremo, porque las dos ramas de Valencia y Madrid están relacionadas, y también hay un temor creciente a que surjan novedades de aquí a las elecciones europeas. Nada sobre GaleoteAyer el líder del PP señaló, al ser preguntado por la dimisión de Bárcenas: «Responderé cuando sea imputado, si lo es, y si no lo es, no responderé porque no tendrá sentido». Sobre Galeote, dijo que no dirá nada hasta que expire el plazo de presentación de la candidatura. Fuentes populares creen que continuará, salvo novedades judiciales.